El estigma
Fecha: 07/06/2019,
Categorías:
Gays
Autor: Barquidas, Fuente: CuentoRelatos
CAPÍTULO 1º
El retorno
Indignado por el retraso, Víctor nota en sí mismo cómo, apagados ya sus motores, el avión va quedando inmovilizado sobre la pista de aterrizaje que la torre señalara al piloto, mientras se apaga, con un timbrazo grave y breve, el luminoso del cinturón de seguridad, desprendiéndose lentamente de él. Mira su reloj; la 1,10 de la madrugada, dos horas de retraso. Había pensado ir directamente a casa de sus padres y recoger las llaves de su apartamento, pero ahora era mejor llamar primero para decirles que iba para allí, a esta hora no se puede presentar nadie después de seis años de ausencia.
Del bolsillo interior de su chaqueta azul marino, saca el móvil, selecciona el número y lo activa. El tono de llamada persiste y persiste. Víctor se sonríe cuando observa los exabruptos con que un grupo de pasajeros increpa a la azafata en la puerta de salida. Va a colgar, nadie contesta y el avión está casi vacío; en ese instante escucha en una voz somnolienta: "dígame". Un escalofrío recorre su cuerpo. Sus fracciones se tensan.
¡Elena!, ¡joder!, esto no me lo esperaba yo.
Vuelve a oír de forma más clara y dura, "dígame". Sin duda es ella; titubea, traga algo de saliva, y finalmente se decide.
Hola Elena... soy yo Víctor.
Un silencio interminable se produce, solo un monótono zumbido se deja oír. Víctor espera su contestación. Esta no llega. La azafata se acerca, es el último pasajero y con paciencia espera su reacción.
Siento llamar tan ...
... tarde, el avión ha venido con retraso, y necesito coger las llaves de mi apartamento, voy para allí. Ahora no puedo hablar más
Concluye metiendo el móvil en el bolsillo de su blanca camisa y enfoca la entrada a la pasarela que le llevará a la terminal del aeropuerto, va pensando en su nueva situación. Huyó de allí, la que era su casa, su familia… su hermana Elena, seis años atrás, con 22, por haber violado, sodomizado, exactamente a esa hermana suya que, ahora, en esa noche o madrigada, era lo primero que, desde la noche de los tiempos, del pasado, reaparecía ante él…
Víctor no quiere ver a su hermana. No está todavía preparado por la sencilla razón que ni él sabe la respuesta a la pregunta de su hermana. Durante estos seis años el recuerdo ha sido como la carcoma que te roe por dentro. Por supuesto su íntima razón no piensa decírselo. Lo mejor es llegar con el taxi, recoger las llaves y salir casi sin hablar. Ya habría tiempo... Suena el móvil, observa el número. Por un momento cierra los ojos y carraspea antes de contestar.
Dime. Elena
Víctor, no quiero que vengas a casa, tengo a mi hija durmiendo, y no sé quién eres -dijo con dicción algo nerviosa.
No sabía que tuvieras una hija, Elena. Siento haberte despertado. Voy a un hotel y mañana me pasare
Como quieras, pero no hace falta que te vayas a un Hotel; ¿dónde estás? –responde con sequedad.
Esperando mi equipaje, pero no quiero molestar a nadie. Déjalo, ha sido un error por mi parte.
Elena no responde, ...