1. La tostada


    Fecha: 10/03/2023, Categorías: Gays Autor: elalcalde, Fuente: CuentoRelatos

    ... entre mis muslos y la noto llegar hasta mis huevos. No puedo evitar un pequeño gemido. Repite el bombeo y cada vez que su polla llega a mis huevos vuelvo a gemir.
    
    En uno de los apretones, su cuerpo sube un poco. Justo para intentar entrar.
    
    Nooo
    
    Mientras le digo que no, le siento entrar. Solo un poco. La cabeza.
    
    No sigas más, por favor…
    
    No puedo seguir. Ya la tienes toda dentro.
    
    Joder, sácala.
    
    La saca entera, pero en cuanto sale vuelve a apretarse.
    
    Hazme caso… déjalo ya.
    
    Si te hago caso. La he sacado. Pero la vuelves a tener dentro.
    
    Déjalo ya… te estás pasando mucho.
    
    Dime que no te está gustando…
    
    No se lo puedo decir. Me está gustando y la curva que ha adoptado mi cuerpo lo confirma.
    
    Suspiro de nuevo, cediendo. Ahora estoy totalmente caliente y echo la cabeza hacia atrás, apoyándola en su hombro, entregándome, sin explicarme muy bien cómo me he ido dejando llevar.
    
    Siento sus labios en mi cuello y mi calentura aumenta. Suspiro, pero no es un suspiro, sino un gemido de aceptación. Estoy en un estado de nirvana absoluto y cada roce lo siento como una descarga eléctrica que me va quemando.
    
    Ni siquiera me importa que aparezca de pronto un camarero que está retirando las cosas del buffet.
    
    Nos ve, pide disculpas y se va diciendo que volverá dentro de diez minutos.
    
    Mi amigo me sigue taladrando una y otra vez, lentamente, buscando lo más interno de mi cuerpo como si en cada embestida quisiera llegar un poco más lejos. Y cada embestida ...
    ... me saca un gemido, cada vez más prolongado, cada vez más alto, cada vez más intenso, hasta que un gemido se une con el siguiente y ya todo es un solo gemido que anuncia mi orgasmo.
    
    Cuando me corro, le oigo dar un pequeño grito de triunfo y acelera las embestidas. Está buscando su orgasmo y no tarda en encontrarlo, apretándose contra mi cuerpo para descargar lo más profundo que puede.
    
    Nos quedamos quietos, respirando agitadamente, recuperando el aire, durante unos minutos.
    
    Sigo con mi cabeza apoyada en su hombro y mi cuello sigue ofrecido. Me besa suavemente. Uno, dos, tres, cuatro, cinco…
    
    ¿Te ha gustado?
    
    Ya lo ves…
    
    Estás buenísima.
    
    Hmmm…
    
    No me apetece separar mi cuerpo del suyo. Me doy cuenta de que es la primera vez que le soy infiel a mi marido. Y tanto: es el segundo hombre que me folla.
    
    Sus besos suben por mi cuello hasta llegar a mi oreja. La mordisquea un poco antes de hablarme.
    
    Creo que deberíamos irnos. El camarero está esperando para recoger.
    
    Contesto con desgana.
    
    No quiero moverme.
    
    Vamos a mi habitación.
    
    No. No quiero más. Yo me voy a mi habitación.
    
    No discute. Se separa y me indica mis bragas para que las recoja. Están salpicadas de mi leche.
    
    Miro las tostadas, abandonadas en la tostadora. Y vuelvo a sonreír tontamente porque me hace gracia verlas allí.
    
    Recogemos lo que tenemos en la mesa y salimos del comedor.
    
    Apenas me doy cuenta de que me acompaña hasta mi habitación. Le veo a mi lado cuando abro la puerta. ...