Nunca digas nunca, yo lo dije y...
Fecha: 08/12/2022,
Categorías:
Confesiones
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... sacar tu misma.
-No, no me atrevo, me da pena. Esto es mucho para mí.
-A ver, yo te ayudo desabrochándole el cincho y el pantalón… ya está, ahora solo tienes que meter tu manita dentro del bóxer y sacarle la verga.
-Huy, se ve más grande que en la foto.
-Y eso que no se la has visto a flor de piel, es inmensa y deliciosa, vamos, sácasela. A ver, dame la mano… viste, si no muerde… ahora sácasela… eso ¿qué te parece?
-Qué caliente la tiene… como me palpitan sus venas en mi mano…
- ¿Te gusta?
-Sí, está bien rica.
-Y espera a que se le termine de parar.
- ¿Se pone más grande?
-Claro, dale una mamada y vas a sentir un placer exquisito, de cómo va creciendo la verga dentro de tu boca…
Se la vi: arrobada, me mordía los labios, casi babeaba. Como no me atreví a mamársela, Lucía sacó la lengua y empezó a lamerle la cabeza, con mi mano agarrando el tronco de esa verga majestuosa, luego, viéndome a los ojos, se la metió a la boca y empezó su mamada, Lucía me tomó la otra mano y la puso en sus huevos, tímidamente empecé a acariciárselos, Lucía se sacó la verga de la boca y me dijo que cambiáramos, ella empezó a lamerle los huevos y como no me atrevía, me jaló de la nuca y me la puso en la boca, por instinto la abrí y su marido aprovechó para enterrármela hasta el fondo de mi garganta, tosí y me la saqué, Lucía se burló de mí, pero yo le iba a demostrar que, no por ser una niña de diez y ocho años, no sabía mamar, así que le volví a agarrar la verga por ...
... el tronco y se la volví a mamar, pero ahora con mi mano, puse límite hasta donde me cabía, Lucía se desnudó y me empezó a quitar la blusa.
-No, Lucía, no me toque, ya sabe que yo acepté siempre y cuando no tuviera nada que ver con usted. Yo no soy lesbiana.
-Yo tampoco, soy hetero flexible.
Y sonrió, a mí también me dio risa, pero se la oculté.
-Estoy hablando en serio, si a usted le gustan las mujeres, es su problema, no mío.
-Ok, no te preocupes, no volverá a suceder.
Andrés se acomodó al centro de la cama y yo me hinqué para mamársela mejor, Lucía estaba atrás de mí, tenía una vista panorámica de todo mi culo, en eso sentí como me lo lamió, sentí su lengua en todo mi asterisco, la volteé a ver con cara de asesinarla, pero la verdad, sentí delicioso; pero no pude decir nada porque Andrés me agarró de la cara y me impidió que me sacara la verga de la boca, me violó la jeta sin compasión, yo lloraba y salivaba; fue entonces, que violentamente, me puso de perrito y Lucía se acercó a ver cómo me iba a coger, dijo:
-Este momento me encanta, cuando veo lo que siente la puta de turno cuando mi marido las taladra por primera vez.
Él apuntó su verga a mi chorreante panocha y me la fue metiendo poco a poco, yo abría los ojos y la boca al sentir como esa pija iba abriendo las paredes de mi sapito, yo pegué un grito cuando me sentí totalmente llena.
- ¿Te gusta cómo te coge?
-Es como me lo había imaginado, siento toda la verga en el útero, me duele, pero es ...