1. Cornudo enamorado


    Fecha: 30/05/2022, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... la carita, toda mojada – me dijo, y comenzó a lamerme sus propios jugos de la cara y la boca mientras movia despacio su mano.
    
    - Es re linda tu pijita amor – dijo rompiendo el silencio varios segundos después – pero es mini. No te enojes, vos sabes que con esta cosita no me podes satisfacer como él. Pero me encanta que te re esfuerces, y se que vas a hacer todo para hacerme feliz, no?
    
    Me miró a los ojos fijo, con media sonrisita clavada, y comenzó a masturbarme más rápido y más fuerte.
    
    - Si… si vale. Te amo. - dije yo, completamente resignado y asimilando mi papel de cornudo poco hombre. Y al cabo de unos segundos acabé en un tremendo orgasmo.
    
    - Ay bebé! Mirá como ensuciaste todo! – dijo riéndose, y comenzó a recoger mi leche con sus dedos.
    
    A continuación sus dedos llenos de leche se dirigieron a mi boca y yo, no entiendo aún por qué, la abrí sumisamente y deje que me los metiera. Luego tragué.
    
    - Me vas a dejar seguir cogiendo con Martín, no bebé? – me preguntó mientras repetía el movimiento de recoger mi leche y hacérmela tragar.
    
    - Si mi amor
    
    - Yo te prometo contarte todo lo que me hace ese machito hermoso, parece que te encanta jeje. – y de nuevo la leche a mi boca. Y yo de nuevo tragando mi propia leche.
    
    - Si… si hermosa.
    
    - Quiero que lo conozcas, y que veas que es verdad lo que te digo, quiero que veas como me coge bien cogidita! El también quiere que lo veas. Va a venir mañana a la noche, sabes? – dijo mirándome fijo con esos ojitos tan hermosos, y llevando los últimos vestigios de leche tibia a mi boca.
    
    Yo abrí los labios y lamí sus dedos, saboreando mi propio semen. Luego asentí con la cabeza. Vale sonrió, me dio un beso en la boca y se acostó de espaldas a mi. Yo hice lo mismo, así desnudo como estaba. Vale se acomodó y pegó su perfecto culazo a mi pijita y lo meneó contra mí mientras decía “hasta mañana, cornudito mio”.
«1234»