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Enseñando a La señorita R
Fecha: 23/03/2022, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Legasex, Fuente: CuentoRelatos
... comenzaron a marcarse en el vestido. Magnifico, pensé. Pase mis dedos por su tanga y estaba húmedo. A la cuarentona se le soltó una pinza. Pararon en el “juego”. La perdedora se arrodillo y la joven se sentó al pie de una de las cruces con las piernas bien abiertas. Yo ya sabía cuál iba a ser el castigo. Mire a mi sumisa, porque ya lo era, aunque ella aun no fuera consciente de su condición. Yo- El castigo –le dije en un susurro- consiste en que la perdedora debe masturbar a la ganadora. No dijo nada, pero se estremeció. Seguro que le excito la idea, aunque yo no sabía si le gustaban las mujeres. -Vamos a hacer una variación –dijo mi amigo- si nuestros visitantes no tienen inconveniente me gustaría que el premio lo reciba la linda mujer que está mirando con los ojos tan abiertos. Inmediatamente la mire. La señorita R ya estaba observándome y negando con la cabeza. No dije nada, pero puse una mirada dura. Yo- Solo si tú quieres –le dije al oído- R- Aún es pronto para eso –me contesto-, pero si lo deseas…. Yo- Querido amigo –comente- prefiero que sigan ellas. Tenía en mente otra cosa que probaría su sumisión y tal vez sería más dura para ella. Yo- He sido bueno, pero te costara algo y espero que cumplas –le dije a la señorita R. La mujer mayor comenzó a masturbar a la joven y yo a tocar el sexo de mi sumisa por encima del tanga. Esta no quitaba ojo de lo que sucedía en la sala. Cuando le metió los dedos en el coño yo se los metí a mi ...
... acompañante. Gimió. Estaba muy mojada, más que otras veces. Luego comenzó a lamerle la vagina y el clítoris. En ese momento le dije a mi amigo: Yo- ¿Te importa? Amigo- Por supuesto que no. Me acerque a las mujeres con la polla en la mano. La joven se la metió en la boca y comenzó a mamarme la polla. Al poco mi amigo se sentó junto a la señorita R y sacándose la polla y se la ofreció. Por el rabillo del ojo vi que dudaba, pero se la metió en la boca. Me corrí en la boca de la sumisa y por descontado que trago mi semen. Luego pidió permiso para correrse y se lo di. La señorita R seguía comiéndole la verga al tipo. Cuando iba a correrse, la saco y se vino en la cara de mi sumisa. Su cara era un poema, seguro que se había preparado para tragar la lefada pero que lo hiciera en su cara la pilla de sorpresa. Tras un pequeño descanso llevé a la señorita R a una de las cruces y la até. Mi amigo se acercó y le puso unas pinzas en los pezones. Por su gesto supe que no quería eso, que no le agradaba, pero de su boca no salió una palabra. Creo que era consciente de la situación en la que estábamos. Nos pusimos una copa y después de un rato viendo el gesto de dolor en la cara de la señorita R, le dije a la sumisa joven que fuera y le quitara las pinzas. Así lo hizo comenzó a lamerle los pezones. Luego le ordene a la otra sumisa que la comiera el coño e hiciera que se corriera. Se acercó y poniéndose de rodillas comenzó a acariciar los muslos y el tanga. Lo ...