En busca de experiencias -2-
Fecha: 19/02/2019,
Categorías:
Bisexuales
Autor: korso10, Fuente: CuentoRelatos
... a él y chupabas bien cortito y fuerte, así como me gustaba a mí.
Sentía tu respiración agitada en la copa de mi teta grande.
—Así papito así —te animaba susurrando a lo gata mimosa— chupa, chupa la teta de mamita que papito va a tener una sorpresita bien linda —agregué.
Te ensañaste de una manera tan provocativa como sucia apretándolo con los dientes y comenzaste a darle golpecitos con la lengua y después lo chupaste bien pero bien fuerte.
Una sensación de vacío me llenó: agradable y placentera, dura y estremecedora.
El pezón se me endurecía cada vez más, cuando chupabas y chupabas fuerte y entonces sentí un cosquilleo en todo el cuerpo, sensación que me era familiar, pero olvidada: sentí como la leche me salía y te miré, entre sorprendida y conforme.
—Si papito, toma la leche de mamita. Dale, chupame la teta, tomate mi leche
La sorpresa de tu cara era increíble, me mirabas sin entender, estabas totalmente desconcertado.
—Chupá chupá la teta, que después tener que seguir chupando por otros lados papi. Dale —volví a animarte.
No perdiste tiempo y te dedicaste a ejercer semejante vacío que no sabía si era más placentero saber y sentir que me chupabas o la sensación de la leche saliendo de mi pezón.
No te imaginás lo erotizante que era ver mi leche en la comisura de tus labios mientras vos me acariciabas, no solo el empeine del pie con la palma de tu mano, sino que con los dedos recorrías el arco, sin sacarme el zapato.
¡¡Como me gustaba eso!!: ...
... cumplir tu fetiche, el mío y saber que amamantarte sería parte de nuestro juego, no como esos extraños fetiches, quizás más depravados, creyendo que sos mi hijo; no, nada más lejos de eso.
Yo sabía que eras mi macho y darte la leche, era darte fuerzas para seguir mientras yo gozaba como una yegua.
A decir verdad, eso no estaba en mis planes iniciales y surgió de casualidad.
Se dio una noche, mientras acomodaba mi placard, luego de haber salido de compras para ese sábado en especial.
Gasté bastante plata en ropa y accesorios sexuales y los estaba guardando algunos y escondiendo a otros, cuando encontré en el rincón del primer estante, el sacaleches que tuve usar los primeros tiempos, luego del nacimiento del nene.
Lo creí prestado o perdido, pero nunca esperando a ser usado de nuevo.
Como ya sabés, mis tetas cobraron una importancia muy grande cuando entraste en mi vida, aprendí a valorarlas y a darle la importancia que tenían, desde el aspecto visual al sexual.
Me gusta mucho cuando las miras, sobre todo cuando crees que no te estoy viendo; ese morbo del voyeur, sea cual fuera la parte de mi cuerpo que capta tu atención, tiene su encanto y fascinación sobre mí.
Había estado casi toda la tarde entre casas de venta de ropa interior, zapaterías, boutiques y en el único sex shop que estaba siendo atendido por una mujer, con lo que mi excitación había sufrido varios altibajos.
Al ver el sacaleches no dudé en usarlo, pensando muy seria y profundamente en ...