VIENTOS DE CAMBIOS
Fecha: 11/08/2017,
Categorías:
Lesbianas
Autor: dulces.placeres, Fuente: SexoSinTabues
... responderle puesto que selló sus labios contra los míos, en la misma puerta de su casa. Pasamos, el ambiente era acogedor, tranquilo, a media luz, con música a bajo volumen, fuimos a la cocina, ella cuidaba la comida que estaba sobre las hornallas y yo hablaba sin parar, producto del nerviosismo que tenía, decía cosas incoherentes mientras ella escuchaba y miraba de reojo, pero llegó el momento qué harta de mis palabras exclamó: - Pero qué diablos! Y dejando todo de lado vino sobre mí para besarnos como dos gatas en celos, ya no pude resistirme, ya no tuve intenciones de hacerlo, respondí beso contra beso, caricia contra caricia, gesto contra gesto, golpe por golpe, nuestras lenguas se cruzaron y nuestros flujos de mezclaron, casi sin darme cuenta le dije: - Yo también te amo… quiero ser tuya… Me tomó de la mano y nos dirigimos al comedor, mis ojos se perdían en su enorme trasero que se bamboleaba de un lado a otro mientras caminaba, la tomé desprevenida, pasando las manos hacia adelante apreté ahora con fuerza sus imponentes tetas, refregando mi cuerpo contra el suyo, mis pechos contra su espalda, mordisqueando dulcemente su delicado cuello me dejaba hacer mientras sentía su pecho inhalar y exhalar pausadamente - Te gusta? te gusta perder el control? - Mmmmm…. Es exquisito…. Al tiempo que desnudaba sus tetas y llevaba mis manos con sus manos hacia ellas, percibí como la excitaba que jugara con sus pechos, así que pasé largos minutos haciéndolo. Débora recuperando la ...
... iniciativa giró sobre mi espalda invirtiendo los roles, la sentí agacharse y bajar delicadamente mi pollera hasta desnudar mis piernas, su lengua se deslizó pausadamente por mis muslos subiendo una y otra vez por mis nalgas, yendo cerca de mi intimidad, donde se perdía la diminuta tanga que traía, a esa altura estaba toda mojada, caliente y sedienta, estaba dispuesta a todo… De repente algo extraño atrajo mi atención, un raro olor - Débora, Débora!! Que ese olor? - La comida! Se está quemando la comida!!!! Interrumpiendo ese momento espectacular corrimos a la cocina para comprobar que todo se había echado a perder, nos miramos y reímos cómplices, entonces dije: - No importa, tengo hambre de vos… Volvimos al comedor, tomó la iniciativa y me colocó un gran pañuelo que tenía preparado de manera de ocultarme la visión, la seda se sentía suave pero firme, ajustada en mi cabeza, me dijo que aguardara un poco, que tenía que preparar algo, sentí algunos ruidos característicos del refrigerador, luego dejó algo sobre la mesa mientras pasaba a mi lado, podía sentirlo, luego ruidos en otra habitación, para finalmente volver a mi lado Tomó una de mis manos y me llevó en un recorrido maravilloso por su cuerpo, por sus pechos, por su vientre, por sus nalgas, solo evitó que tocara su vagina, cosa que solo hizo que la deseara más todavía. Se sentó en una silla y luego me hizo sentar sobre ella, con mis piernas abiertas una a cada lado, apretó mi cintura contra la de ella haciendo que nuestros cuerpos ...