1. Cómo me casé con uno de mis profesores (Parte 1)


    Fecha: 07/07/2023, Categorías: Sexo con Maduras Autor: AranzaS28, Fuente: CuentoRelatos

    ... vete a casa temprano, aprovecha que te puedes ir a estas horas.
    
    - ¿Está seguro?
    
    - Sí, seguro, bonito fin de semana.
    
    Si dejaba pasar esta oportunidad no sería más que otra alumna, tenía que estar con él en el único momento en el que parecía vulnerable.
    
    - ¿Puedo pasar? - Pregunté y me hice un poco para enfrente.
    
    - Estoy ocupado, ahora, ¿es urgente o podemos hablar el lunes?
    
    - Es muy urgente, profe, perdón por molestar tanto.
    
    Me abrió la puerta sin decir nada y pasé rápidamente. Estaba oscuro en comparación a todas las veces anteriores. Prendió las luces en cuanto me senté en la silla y se sentó detrás de su escritorio.
    
    - ¿Qué necesitas, Aranza?
    
    Me quedé muda, no había pensado bien qué hacer ya estando dentro.
    
    - Nos dijo que si nos llegábamos a sentir muy mal podíamos hablar las cosas con alguien, dejar salir todo para pensar mejor después.
    
    - ¿Qué es lo que quieres hablar?
    
    - Lo digo por usted.
    
    Me desvió la mirada y suspiró antes de voltear a verme.
    
    - Eres alumna mía, Aranza, no creo que esto sea adecuado, ¿sabes?
    
    - No le diré nada a nadie, profe, lo juro.
    
    - Yo sé que no le dirías nada nadie, confío mucho en ti, pero sigue sin estar bien.
    
    - De verdad, perdón por insistir tanto, pero usted nos dijo...
    
    - Ya sé lo que dije, Aranza, no me empieces a sermonear con mis propias palabras. No puedes obligar a hablar a alguien que te está diciendo que no quiere hablar contigo, ahora, en serio, vete a casa y métete esta idea en la ...
    ... cabeza.
    
    La manera en que me lo dijo, cómo golpeó el escritorio con el dedo varias veces. Mis ojos se pusieron llorosos y la mandíbula me temblaba. Pude ver cómo, de un momento a otro, su expresión cambió y se puso de pie en cuanto comencé a levantarme.
    
    - Aranza... perdón, de verdad. No, no sé qué decirte, niña.
    
    - ¿Quiere que me vaya?
    
    - No, no es eso.
    
    Se volvió a sentar y se quedó viendo una pluma un buen rato.
    
    - No estoy enojado contigo. Es que estoy muy inquieto - otra vez, los ojos se le pusieron llorosos -, me voy a divorciar y acabo de tener a mi niño.
    
    ¡VICTORIA! La palabra divorcio me hizo dejar de lado el sentimiento de "la cagué" y pasé de un instante a otro a la felicidad pura. Pensaba que no tenía posibilidad alguna, me había equivocado. No demostré esto, claro, pero muy en el fondo me sentí la mujer más afortunada del planeta.
    
    Me contó su miedo de perder a Samuel (su hijo) y cómo es que estaba feliz de ser padre pero se arrepentía de haber tenido un niño con su mierda de esposa. Ya traían problemas desde un año atrás y pensaba que el bebé iba a ayudarlos aunque sea un poco.
    
    Me dediqué a escuchar y, eventualmente, yo misma empecé a llorar también. Quizá pasaron unos quince minutos en ello, pero parecieron horas.
    
    Cuando terminó de contarme y lo vi más calmado, le pregunté si podía abrazarlo. Dudó un poco, pero después me llamó con el brazo. Seguía sentado, me agaché un poco y rodeé su cuello con mis brazos, él me pasó su brazo derecho por ...