1. Aprovechándome de la maestra de ballet


    Fecha: 06/09/2022, Categorías: Lesbianas Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    ... algunos!
    
    J: Como las de todos ahorita que estamos hablando, seguro se están imaginando que estamos desnudas, ¡jajá!
    
    Su forma de hablar conmigo y sus comentarios poco a poco comenzaron a relajarme, tanto que unos minutos después parecíamos las mejores amigas, nos tomábamos fotos, brindábamos, nos parábamos a bailar, lo cual llamo la atención de todos, ver como movíamos nuestras caderas y como nos rozábamos y tocábamos, seguro hubo miles de erecciones.
    
    Llegando la madrugada, el alcohol nos había dominado, yo ya la abrazaba y ella a mí, algunos intentaron convencernos de irnos con ellos, pero nosotras estábamos a gusto juntas, tanto que al final quedamos ella y yo y comenzó una charla que dio inicio a lo que se venía.
    
    J: Necesitas darme unas clases de zumba, ¡me quiero mover como tú!
    
    L: Jajá, cuando gustes, ¡con la condición que me enseñes a ser tan flexible!
    
    J: Dos hijos y un marido terrible y aun soy flexible, jajá, ¡quien lo diría!
    
    L: Jajá, ¡yo también estoy casada y tengo hijos!
    
    J: Tenemos más en común que otros, oye te parece ir a mi local, ¡te enseñare algunos movimientos!
    
    Yo acepte ir con ella, pagamos lo que debíamos y nos fuimos al tercer nivel donde estaba su local, el guardia era migo nuestro así que no nos impido el paso, ya ahí, puso música de danza y comenzó a moverse, por el alcohol parecía torpe, pero eso no quitaba los sexy que se veía moviéndose y levantando las piernas mostrando su ropa interior.
    
    Yo atónita miraba la escena, ...
    ... comencé a sentir una gran excitación, mi tanga empezó a humedecerse, imagine desnudándola frente a su gran espejo, ene so tomo mi mano y me jalo para que hiciera lo mismo, eso fue divertido ella trataba de enseñarme y yo aunque conseguía unos pasos era aún una novata y mejor los cambie pro mis movimientos de zumba, ella trato de seguirme pero por sus tacones no pudo y ambas chocamos y nos caímos al piso, ahí ene l suelo, un mar de carcajadas de dos alcohólicas hacía eco en el local, en eso nos miramos fijamente y comencé a besarla!
    
    Ella nos e negó, el beso fue espontaneo y sensual, ¡justo cuando mis manos fueron a sus piernas ella me quito la cara y se puso de pie!
    
    J: Esto no es correcto, ¡soy casada!
    
    L: ¡Lo siento, me deje llevar!
    
    J: ¡Mejor vámonos, ya es tarde!
    
    L: Claro, ¡te sigo!!
    
    Desconcertada por su cambio repentino, tomé mi bolsa y la seguí rumbo a la puerta, ¡pero antes de abrirla ellas e detuvo y me volteo a ver!
    
    J: Nunca he hecho esto, ¡pero siento que lo necesito!
    
    L: ¿De qué habas amiga?
    
    J: ¡De esto!
    
    En eso ella me beso, me beso tan apasionadamente que me sentí flotar, nuestras manos se agarraron, me acerque a ella hasta sentir nuestras piernas cruzarse, el beso era magnifico, ¡ni mi marido me besa así y esa mujer lo estaba haciendo!
    
    Dejamos caer las bolsas, nos fuimos adentrando más a su pista de baile, ahí entre caricias y arrumacos nos quedamos frente al espejo, yo tome el control y le despoje de su sensual blusa dejando sus hermosas ...