El mesero de la calle 59
Fecha: 06/06/2022,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Urania87, Fuente: CuentoRelatos
... atuendo no pudo resistirse mirarme con descaro como si me quisiera romper la ropa y hacerme suya ahí mismo, quizás en otra ocasión le hubiera permitido al tipo del taxi follarme en cualquier callejón donde el me llevará, pero ese no sería el momento adecuado, pues mi cita me esperaba en su departamento y yo moría por estar con él. El taxi me dejo en la puerta del edificio, al llegar le avise y con un mensaje me pidió subir al tercer nivel, al departamento 35.
Me había gustado tanto ese chico que me esmere en mi atuendo: falda negra corta con un mini fruncido que me sentaba bien al caminar, un top blanco que me llegaba al ombligo que sujetaban mis senos con solo dos botones, debajo había elegido un conjunto de tanga negra de encaje al igual que mi bra de media copa, mis zapatillas de tacón alto. Me sentía una completa puta yendo a ser penetrada por su hombre.
Tal fue mi sorpresa que al abrir la puerta, este chico estaba completamente desnudo, en su mano izquierda llevaba un antifaz y con la derecha tomaba su verga semi-erecta, yo quede boquiabierta de lo sorprendida que estaba viendo, no me esperaba tal recibimiento y menos de esa manera.
Enseguida me invitó a pasar, en cuanto di un paso hacía dentro, me tomo de la mano, cerró la puerta y me empujo hacía la puerta, apoye las manos y mi espalda sobre la puerta mientras este chico presionaba su cuerpo hacía el mío, en seguida mi cuerpo reacciono lubricando mi entrepierna, mordí los labios de los excitada que me estaba ...
... poniendo tal situación. Sentía su verga apoyada en mi entrepierna, aun por encima de la tela de mi falda, pude sentir el contorno de su verga ejerciendo presión a la altura de mi vulva.
—Te estaba esperando bonita, me tienes con la cabeza vuelto loco, muero por tener tu cuerpo toda la noche —me dijo plantándome un beso, pasó su lengua sobre la comisura de mis labios, yo suplicaba porque me besara y me tomara ya mismo.
—Yo también tenía muchas ganas de verte, que propones —le dije dibujando una sonrisa coqueta en mi cara.
—Que hagas lo que yo te diga, que dices —me dijo mostrándome el antifaz que llevaba en la mano.
—Sí, acepto. —le dije ansiosa por saber que iba a pasar.
Hizo un movimiento de cadera restregándome su entrepierna, me beso con pasión acariciando mi barbilla y enseguida me puso el antifaz cubriéndome por completo la vista.
—Estás segura de continuar, te aseguro que vas a disfrutar, pero este es el momento para desistir —me dijo, no tenía duda que quería entregarme nuevamente a ese hombre, ese juego me estaba gustando, sentía mojar mi tanga con solo sentir la respiración de ese chico.
—Sigue, no te detengas, quiero ser tuya esta noche y las que quieras papacito —le imploré ansiosa de que seguiría.
Metió su mano por debajo de mi falda y con su palma toco mi vulva por encima de la tanga.
—jajaja, estás bien mojada y ni siquiera empiezo, así me gusta que seas una puta.
Quitó los botones de mi blusa y me la quito con desesperación al igual ...