Filomena a mi pesar
Fecha: 25/05/2022,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Thotem, Fuente: CuentoRelatos
... perilla, era alto, descamisado, en su pecho lucía una gran cruz de oro falso, en sus orejas llevaba pendientes. Pisaba firme con toda la planta del pie en el suelo, su cuerpo estirado al máximo, con una mirada retadora hacía Filomena. El otro no era alto pero lo parecía, rapado, con bigote, un tatuaje asomaba en su cuello y piercing en ambas orejas y en las cejas. Enervado y con decisión luciendo una camisa hawaiana, donde también asomaban varios collares se encaminó también hacía la pista. Los dos macarras de perímetro tendrían veinte y pocos de años. Me entraron ganas de orinar próstata ya no es lo que era. En la hilera de urinarios había dos hombres, oí como decían:
—¿Has visto a la puta esa?
—Si, tiene meneo la hijaputa, viene a por carnaza —contesto el otro.
—Va desbragada y sin sujetador, es carne de cañón.
—Ya le han echado el ojo los Cortana, esos cabrones se tiran a todas las asequibles.
Salí, y efectivamente, eran cazadores natos, ya estaban bailando y cuchicheando con ella, los otros que en principio se le habían acercado ya habían sido descartados. Bebieron los tres en la barra, en un momento tras unas breves y aparentes eufóricas palabras de ella, ellos me miraron de forma penetrante, despectiva con aires de superioridad con una leve sonrisa socarrona entre ellos. Filomena se me acerco, me dijo:
—¿Cuál?
—Jóvenes si son, la verdad, será un plus para ti.
—Tiene 28 el de la coleta, el otro 18 recién cumplidos. Creo que elegiré el de la ...
... coleta.
—Parece que tiene tablas, por su porte, ahora bien, incluso puedes ir con los dos, sé que no hablamos mucho del pasado, pero ¿has hecho tríos?
—No, la verdad es que no.
—Buena ocasión dije tajante.
—Yo no… no est… estoy segura —dijo al mismo tiempo que fue al lavabo.
Los dos no dejaban de mirarme en ese instante, se levantaron y vinieron hacía mi, su porte achulado con risotadas entre ellos me causó impresión, ese descaro la verdad es que me ponía, y mucho. Se sentaron y el de la coleta dijo:
—¿Qué tal viejo?
—Ya ves, aquí mirando el ambiente.
—Tu vieja va de rabo, descarada la cabronaza y nosotros llevamos buena onda, de la buena sabes, viejo. Somos primos, vamos siempre juntos, ella la vieja, nos ha dicho… que tú, viejo, el que quieras para ella, pero digo yo, una tipa que va sin ropa interior pide polla a gritos, por eso por qué no nos lo montamos con mi colega el p primo… Sabes arriba mismo del bareto vivo yo, dime, viejo.
Al decirme esto se inclinaba hacía adelante, su cruz tintineaba sobre la mesa, al mismo tiempo que miraba a su joven primo de reojo. Me incliné también hacía adelante, aguantándole la mirada y dije:
—Por mi no hay problema, creo que sabes manejar una mujer.
—No lo dudes, viejo. Me tiro a mucha piva, mi primo recién empezando, es bueno enseñarle, ya veras, nos va a flipar la ostia puta —dijo, al mismo tiempo que chocaban sus puños con el primo en señal de victoria.
Se levantaron y volvieron a la barra, esperando que ...