Fantasía de secuestro: La enfermera sádica
Fecha: 02/03/2022,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... platos, gruesos y de color amarillo. Comenzó a enfundarse los guantes de goma en sus manos, la quedaban muy ajustados, tenía unas grandes manos y brazos y la goma de los guantes entraban con dificultad. El sonido de la goma me estaba poniendo nervioso mientras se esforzaba por ajustárselos a sus manos. Finalmente consiguió que encajaran los guantes en sus manos, la llegaban hasta casi el codo por encima de la bata , y la quedaban muy apretados, parecían que podían reventar en cualquier momento, pero lo que pretendía era tener facilidad de movimiento y se ajustaran a sus manos.
Se dirigió hacia el armario, agarró un rollo de cinta americana de color gris y se dirigió de nuevo con ella hacia mí. Se plantó frente a mí y despegó el extremo del rollo de cinta mientras dirigió su voz hacia mí:
- No quiero escuchar una sola palabra, no me gustan los quejicas ni los llorones, no pienso escuchar una sola palabra o queja - Me dijo para intimidarme a la vez que continuaba despegando el extremo de la cinta americana.
Consiguió asustarme, entendí que pretendía amordazarme con la cinta, traté de disuadirla.
- No es necesario señora, no gritaré ni hablare - La pedí educadamente a la vez que volvía esbozar una sonrisa burlona.
- Ohhh sí.... ya creo que es necesario... Claro que gritaras, voy a castigarte duramente, eres un chulo engreído y necesitas disciplina, recuerda lo firmado, te advertí que no podrías pedir ayuda - . Me dijo duramente.
La señora levanto su bata ...
... blanca hasta su cintura, dejando al descubierto sus medias blancas de liga y unas grandes bragas blancas. Se bajó sus bragas con sus manos enguantadas por sus piernas hasta sacarlas por sus zapatos. Agarró sus bragas blancas entre su mano enguantada y las hizo un ovillo. Las acercó a mi rostro y me llegó un fuerte olor, estaban sucias, con restos amarillos y marrones.
- Abre la boca - Me ordenó.
Abrí la boca resignado tal como me ordeno y noté como introdujo sus bragas sucias en mi boca. Noté como su mano enguantada comenzó a forzarlas al interior de mi boca, utilizó su fuerza y las empujó para que entraran por completo dentro de mi boca. No entraban ¡¡ eran demasiado grandes sus bragas ¡¡ no conseguía introducir por completo sus bragas en mi boca. Sentí su mano de goma sobre mi nariz y la atenazó fuertemente:
- Abre más la boca o no te dejaré respirar - Me dijo seriamente.
Tapaba mi nariz entre sus dedos enguantados a la vez que sus bragas sobresalían de mi boca. No tuve más remedio que abrir la boca todo cuanto pude, para que soltase mi nariz y pudiese respirar. Ella empujó más fuerte con sus dedos enguantados hasta que consiguió que entraran por completo en mi boca. Sus bragas rellenaban por completo mi boca y las empujó hasta la garganta. Sentí nauseas ya que desprendían un sabor detestable, sabían a orines y suciedad de su trasero. La señora pegó el extremo de la cinta americana sobre la comisura de mi boca y comenzó a pegarla sobre mi boca y posteriormente ...