El sueño de Irene
Fecha: 20/12/2021,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... fuerte que te has desvanecido. Pero ya estás bien… ¿No?
—Sí, creo que me encuentro mejor. Pero ¿Qué queréis de mí?
—Nada, amor mío. Solo intentamos hacerte recordar… Llevamos mucho tiempo esperando este momento. No te vamos a hacer ningún daño. Tú solo mira.
Me ayudan a incorporarme, me siento. Estoy en una especie de cheslóng, en el centro de una amplia estancia.
Pero esta no es mi ropa. Llevo un vestido de gasa, blanco, muy vaporoso y sin ropa interior. Aunque la temperatura es agradable, siento un escalofrío. Siento mi cuquita mojada.
Junto a Safo hay tres mujeres más. Llevan vestidos parecidos al mío, pero de colores y dejan entrever sus siluetas, las manchas oscuras del vello púbico y sus pezones… Algo se mueve dentro de mi cuerpo. Una contracción en el bajo vientre, mi entrepierna se moja más. ¡Estoy muy excitada!
No sé de donde surge una música suave, parecen flautas y tambores que marcan el ritmo. Las cuatro mujeres bailan a mi alrededor. La cadencia de los tambores aumenta. La danza se hace trepidante. Dos manos me levantan, invitando a sumarme al baile, me muevo por inercia, mis piernas se mueven sin control, giramos las cinco en un frenético torbellino de cuerpos. Roces, caricias vertiginosas al cruzarse los cuerpos, abrazos furtivos, besos dulces, rápidos…. Una de las bailarinas se abre de piernas sobre mi cara y contemplo su sexo rosado, brillante por la humedad. Me atrae poderosamente y acerco mis labios a la fruta que se me ofrece y saboreo ...
... su néctar, me sorprende la dureza de su clítoris. Se aleja y veo que era Safo quien me entregaba su manjar… Vuelve y lo tomo de nuevo lamiendo y acariciándolo, algo me lame y se introduce en mi sexo provocándome un poderoso orgasmo que parece se transmite a Safo que convulsa me abraza y besa lúbricamente.
Caemos extenuadas en el suelo cubierto por una gruesa y suave alfombra… La melodía se vuelve suave, dulce. Los besos se repiten, las manos inquietas y atrevidas, palpan los cuerpos…Las miradas cargadas de pasión, los besos inflamados, labios sobre labios, lenguas lujuriosas mancillando la piel.
Desaparecen los vestidos. Cinco cuerpos desnudos cubiertos de sudor y ardiendo de deseo con piernas entrelazadas.
Me dejaba hacer de todo. Besos en los pezones, erguidos, duros, lenguas en mi clítoris. Se excitan rozando mis pies, las rodillas, los muslos, en sus sexos. Safo me besa apasionadamente.
Un calor invade mi cuerpo y llega… Imparable… Desde lo más profundo de mi vientre, surge una oleada de placer arrollador, sube por mi cuerpo, lo invade, desde los cabellos de la cabeza hasta los dedos de los pies… Y se repite, una y otra vez, hasta volverse insoportable por su duración e intensidad… Pierdo la noción del tiempo, del espacio… Mi sexo es un rio…
¿Esto también ha sido un sueño?... Safo besa mis labios, coge mi cara con las dos manos.
—Atthis. El sueño es quién te ha traído hasta mí… En el universo donde se mueven los sueños, el espacio, el tiempo y la materia ...