descubriendo a mami azucena
Fecha: 25/05/2021,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: Leonela V, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... no dejaba de ver sus pechos redonditos y paraditos y cómo sus pezones rosados se marcaban perfectamente, transcurrió la cena entre charlas de mi madre que a diferencia mía habla mucho. Todo parecía normal pero mi corazón latía a mil por hora. El aroma de sexo del short llegaba hasta mí. Yo no sabía que pensar, pero estaba excitada.
Terminamos, lavamos los platos como todo el tiempo, ya mi susto había pasado pero mientras lavamos los platos, ella me dijo algo inusual. -Amor, ¿porque no nos tomamos fotos?-. Se me nubló la mente. Solo dije: “OK”. -Bueno, hija, pero tienes que ponerte ropa como la mía.
Terminamos de secar la vajilla y guardarla y corrí a mi cuarto. Estaba segura que mamá quería jugar y quería seguirle el juego, bajé con un short muy ajustado blanco de algodón y un top blanco para hacer contraste con lo que ella lucia. -Muy bien hija me gusta.
Te ves fabulosa- me decía mientras yo le hacía un breve modelaje.
Eligió la zona más iluminada de la sala, puso una alfombra y tenía todo listo para la sesión amateur.
Muy bien, tómame fotos a mí y luego yo te tomo fotos a ti y luego colocamos la cámara y nos tomamos las dos juntas. Así comenzó al inicio hizo poses normales, luego comenzó a subir la temperatura, ella sonreía como si fuera un juego y yo también, pero pasaban cosas dentro de nosotras que no queríamos reconocer, finalmente comenzó a tomar poses como de modelo porno con expresiones de lujuria, tocando sus senos, y poniendo su mano en su culote y muy cerca ...
... del pubis.
Yo estaba aturdida de excitación y mi madre lo sabía. Cambiamos y ahora ella sería la fotógrafa, comencé tímida, poco a poco ella me fue alentando a soltarme y ser más atrevida, así fue, no tarde en hacer todo lo que hizo mi madre. Foto por foto, reíamos pero por dentro sabíamos que nos moríamos.
-Ahora las dos juntas- dijo ella. Colocó la cámara y comenzamos a posar. Yo posaba como siempre. Pero mi madre me regañó. -Tienes que ser más sexy amor, así.
– Y me enseñaba, me movía mi cuerpo. Quería fotos eróticas de las dos, le seguí el juego hasta extremos casi muy cerca de besarnos, cruzamos nuestros cuerpos siempre fingiendo ternura pero por dentro emanando lujuria, rozándonos los senos, y muy cerca una de la otra, con nuestros labios muy cerca casi besándonos, pero sin ir más allá, cada pose terminando todo con risas nerviosas. Finalmente tuvo otra gran idea.
-Grabémonos bailando juntas.
Ella puso en modo película la cámara, y yo puse música lenta y comenzamos a bailar, nos rozábamos, reíamos y jugábamos. El momento más erótico fue cuando me puso de espalda a ella y comenzó a frotar su pubis contra mis glúteos. Yo me reía y hacía mi cuerpo para atrás, mientras ella hacia su cuerpo para el frente fingiendo que me lo hacía. Yo no podía creer que habíamos llegado a ese punto, estaba visiblemente mojada y parecía no importarle, luego cambiamos y ella me dio sus nalgones y yo le correspondí; sentía esos glúteos en mi cuca estaba que ardía de placer, ella se movía ...