MARISOL. - Relatos Eróticos

MARISOL.

... te llegaras 
  a caer podrías matarte.Mira,si queres
  Yo,te cargo a caballito y te subo y bajo
  tantas veces como quieras,pero,no lo
   vuelvas a repetir.¿Es un trato?".-
:"¿En serio?'¡¡Bueno dale!!".-
Me puse en cuclillas y,ella,trepó por mi espalda y se acomodó sobre mis hombros.Demore un momento en darme cuenta,pero,al empezar a caminar noté algo raro sobre mi nuca.Me negaba a aceptarlo,pero,estaba¡¡SIN BOMBACHA!!.
Podía sentir su conchita desnuda sobre mi cuello en la base de mi nuca.Al llegar a su piso,la bajé en la puerta de su dpto.
abrí y le indiqué que entrará.Yo bajé,aún, shockeado.Pero,a los minutos tocaron a mi puerta.Al abrir me encontré con los rulos que enmarcaban tan bonito rostro.
:"Pedro,me dijistes,tantas veces como yo
  quisiera.¿Me llevas otra vez?Me gustó
  mucho.Las cosquillas son más ricas".-
Recién ahí entendí que las cosquillas a las que se refería eran las que sentía en su conchita al deslizarse y que ahora se las producían,seguramente,los pelitos de mi nuca.El,sólo,pensamiento me hizo tener una erección,que ella pudo ver en el cambio de forma de mi short.Cosa        que,por supuesto,ella no relacionó con la imagen que se dibujó en mi mente.La visión,en mi cabeza,de su conchita acariciada por los pelos de mi nuca estuvo a punto de hacerme eyacular. 
Ella insistió:
:"Dale,Pedro,vos me lo prometiste".-
Sin saber muy bien lo que hacía,de nuevo,me agache y ella volvió a montar sobre mis hombros.Al llegar arriba dijo
:"No,no me voy a ...

... bajar.Quiero más".-
¿Era mi imaginación o su voz se sentía distinta?.Más ronca y,casi,agitada. 
Mientras bajaba las escaleras,para mi asombro,empezó a frotar su conchita contra mi nuca y sus gemidos se hacían mas nítidos.Mientras movía sus caderas,
yo,sentía la tibieza de su zorrita que se refregaba contra mi cuello.Imaginarme a sus labiecitos gorditos y húmedos gozar con los vellos de mi cuello hizo que mi pija,amenazara con saltar de dentro de mi short.Al llegar a la puerta de dpto.abrí y entre con ella sobre mis hombros.La bajé delante mío y mirándola le dije:
:"Marisol,¿Puede ser que te hayas 
  olvidado de ponerte alguna prenda?"
Mientras movía de un lado a otro su cara
con toda la inocencia del mundo dijo:
:"Pero,no Pedro,no me olvidé.Si me la 
  pongo no me da cosquillas y son muy
  ricas.Ahora,me gustan mucho más las
  que siento cuando vos me llevas".-
Semejante respuesta fue escuchada por mi verga que por poco asoma su cabeza por sobre mi short.Ya,con mi voluntad y buenas costumbres en decadencia,le hice una pregunta,obviamente,cargada de segundas intenciones,le dije:
:."¿Estas segura,Marisol,que no tenes
     puesta tu bombachita?".-
Mirándome como si estuviera viendo un bobo,alargó su mano,tomó la mía y la introdujo por debajo de su pollerita.Mi dedos hicieron contactos con sus labios gorditos y húmedos.Inmediatamente,su gesto cambio,mientras,yo,empezaba a pasear mi dedo medio por el,delicioso,
surquito tibio de su zorrita.Me arrodille frente a ...