1. En mi trabajo...


    Fecha: 26/06/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Ejecutiva Mx, Fuente: CuentoRelatos

    ... los proveedores de zapatería que me habían poseído anteriormente, normalmente bastan unos minutos de estos movimientos para hacerlos venirse, pues según me platican, el verme las nalgas y sentir como los aprieto es más que suficiente para que se vacíen dentro de mi dándome su leche caliente, ahora lo que quería era sentir como se vaciaba Fernando mientras yo seguía mamando ese pene enorme de Israel que ansiaba sentir en mi...
    
    ...Sentía el rico vaivén de tus nalgas y como apretabas mi pene con tu exquisita vagina. Me contenía lo más que podía ya que el cuadro de tus ricas nalgas, tu anito fruncido y ver como mamabas la gran verga de Israel, me ponía a mil. Cada vez que podía, te sacaba el pene de la vagina y lo frotaba con tu ano, sin meterlo, ya que no estaba seguro de que te fuera a gustar el sexo anal.
    
    Me retiré un poco y empecé a lamer tu vagina y tu anito mojado. Mi leche estaba a punto de salir y te pregunté en donde querías que te la echara...
    
    ¡Dámela en la boca!, le grite a Fernando, mientras me volteaba para tomarle el pene en la boca, me acerque y me lo metí a la boca ansiosamente, mientras, sentía como le crecía el pene en mi boca a punto de estallar, Israel me acomodo sobre él y me puso la punta de su enorme pitote entre los labios ...
    ... de la vagina y me dijo: metételo.! Sentí como entraba la cabeza de ese enorme monstruo en mi raja y sentí que todo se ponía negro... creo que perdí el conocimiento por un segundo al sentirlo penetrándome y al mismo tiempo como el semen de Fernando me llenaba la boca...
    
    Me moví rápidamente sintiendo el pene de Israel endurecerse más aún dentro de mi raja alistándose para llenármela de su semen espeso y caliente, Fernando se alejó un poco para poder observarnos coger como dos amantes calientes y me dediqué a cabalgar a Israel gimiendo como una hembra caliente a punto de venirme de nuevo cuando sentí como Israel me sujeto de las caderas fuertemente y me grito: me vengo Mariela!!, eso fue mi señal para dejarme ir totalmente y sentir como sus chisguetes me llenaban la raja mientras yo le daba mis jugos en una venida simultanea que me dejo más que satisfecha...
    
    Ahora todo se veía diferente, tenía a dos machos nuevos a mi disposición en el trabajo y seguramente me darían este tratamiento muchas veces más por separado o juntos, me daba lo mismo como lo quisieran en tanto me dieran su leche con regularidad.... llegué a casa llena a tope de semen de ambos machos y solo deseaba dormir cuando entre entré a la habitación y encontré a mi marido dormido ya... 
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