1. Las desventuras de Elena (6)


    Fecha: 08/06/2019, Categorías: Poesía Erótica, Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... Carmelo! ¡Eso es! –gritó el que seguía cogiendo a Elena por el culo. -¡Ahora sí me gusta!
    
    Elena, con tres vergas dentro de ella, continuaba sumida en el vértigo de sus instintos, que le anulaban toda idea. Era como un animal entregado a la más desenfrenada sexualidad. Sintió los chorros de semen casi al mismo tiempo en su trasero, en su concha y en la boca, al par que los tres Amos se retiraban gruñendo y jadeando ruidosamente y ella caía al piso de costado, con la boca llena de leche y estremecida por las convulsiones de su propio orgasmo.
    
    -Es hermosísimo y muy excitante lo que estoy viendo, Wanda... Estoy empapada... –comentó Julia llevándose una mano a la entrepierna y estirándose en el sillón.
    
    -No seas tonta, querida, ¿para qué masturbarte si ahí tenés a tu hembra? –le dijo la carcelera de cuya concha también había empezado a manar flujo.
    
    Julia no lo pensó dos veces. Se desnudó de la cintura para abajo, salvó rápidamente la distancia que la separaba de Elena, la tomó por el pelo con ambas manos y echándose de espaldas en el piso con las piernas abiertas le gritó:
    
    -¡Haceme gozar, puta! –y en esa suerte de oscuridad sicológica que estaba viviendo la esclava aplastó la cara contra la concha de su Ama y empezó a lamerla provocando un alboroto entre los Amos, que estallaron en aplausos y exclamaciones. Uno de ellos se colocó a espaldas de Elena y tras arrodillarse entre sus piernas cruzó ambos brazos por debajo del vientre la esclava, le elevó las caderas y la ...
    ... penetró por el culo. La esclava, sobresaltada por el repentino asalto, interrumpió por un momento sus lamidas a la concha de Julia, pero fue sólo hasta que el Ama, excitadísima, le gritó:
    
    -¡Seguí chupándome, grandísima putona, o te despellejo las nalgas a varillazos!
    
    Elena redobló sus esfuerzos, atemorizada por la amenaza, hasta que Julia explotó en un violento y prolongado orgasmo mientras el Amo acababa abundantemente dentro del culo de la esclava.
    
    El clima iba alcanzando cada vez un mayor voltaje erótico. Los Amos que aún no habían penetrado a Elena se lanzaron sobre ella, la pusieron en cuatro patas y la fueron usando por sus tres agujeros con violencia impiadosa, a pesar de la cual Elena tuvo varios orgasmos.
    
    Los tres superdotados coincidieron en desdeñar la concha para penetrarla por el culo, después de aplicarle vaselina en la entrada del orificio y untar con esa pasta también sus propias vergas.
    
    Discutieron brevemente por el primer turno y al final uno de los vergudos aludió a su antigüedad en El Club como razón válida para ser el primero, y una vez logrado el consenso hizo que pusieran a Elena de panza sobre el respaldo de un sillón.
    
    Colocado detrás de ella miró durante un momento ese amplio y hermoso culo a su disposición, mientras sostenía su pija erecta con su mano derecha.
    
    -Ahora sí que vas a probar lo que es bueno, puta... –dijo por fin el Amo y avanzó con su ariete hacia el objetivo. Apoyó la punta en la pequeña entrada y después de algunos ...