Daniela y Sofía, madre e hija
Fecha: 19/08/2017,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... con su ropa interior también de leopardo, y yo vestía un vestido blanco. Invitamos varias de nuestras amigas, y simplemente nos fuimos a un bar after-office, bailamos con varios hombres, tomamos tragos e hicimos fiesta. A mitad de la noche nos sentamos mientras las demás bailaban y ella me preguntó si había estado con alguien. Yo le dije -Ehhhhh. -. Antes de contestar ella interrumpió y me pidió que le dijera la verdad, yo le dije que no había estado con nadie en especial. Y ella me preguntó si me gustaban los hombres o las mujeres. Me hice la sorprendida por la pregunta y le dije que me sentía muy atraída por las mujeres y le pregunté. -¿Y vos, mamá?-, mirándola fijamente a los ojos. Ella me contesto: -¿Y vos qué pensás, hija, acaso no me viste con tu padre?-. La interrumpí y le dije -Decime la verdad-. Ella me tomó la mano y me dijo. -OK, hija, yo crecí en una época muy distinta y en aquel tiempo tu padre me pretendía, yo quería salir de dudas sobre mi identidad sexual, y cuando estuve con él, me di cuenta que era 100% lesbiana, pero para mi suerte quedé embarazada y tuve que casarme con él-. Yo le repliqué. -¿Pero por qué suerte?- Ella contesto. -Porque así tuve la hija más hermosa del mundo, la cual amo sobre todas las cosas y que deseo estar por siempre con ella más que nada en el mundo -Gracias, mamá-, y nos abrazamos. Decidimos abandonar la disco, les avisamos a nuestras amigas y nos fuimos, al llegar a casa le dije. -Buenas noches, mamá, gracias por esta noche me ...
... divertí mucho-. Ella me dijo. -Buenas noches, hija. - Caminé a mi cuarto, pero ella me detuvo y me dijo: -Amor, por qué no dormimos juntas hoy, andá a cambiarte y te espero en mi cuarto. Yo fui con el corazón a mil por hora, me saqué el vestido, quedándome con un conjuntito de corpiño y tanguita de algodón blanco, y me fui al cuarto, ella me esperaba de pie junto a la cama, con su tanguita animal print de leopardo, su vagina se le partía de lo ajustada y se puso una toalla para cubrir sus enormes tetas. Entré, dí una vuelta para ella, ella se acercó y me abrazó, quedamos frente al espejo grande de cuerpo entero, nos contemplamos las dos y comenzamos a acariciarnos suavemente. Mirándonos a los ojos desde el espejo yo le pregunté por qué no se volvió a casar, ella respiró profundo y me contestó con mucha calma porque no le gustan los hombres, hubo un silencio, le tomé la toalla y se la quité lentamente, dejando ver sus senos maravillosos, ella agachó la mirada y le pregunté por qué no tenía novia, volvió a mirarme a los ojos y me contestó que cuando se divorció lo pensó pero al verme de niña tan pequeña y hermosa se dio cuenta que no necesitaba otra mujer en su vida, que ya tenía a la mujer más hermosa del universo. Yo le sonreí tímidamente y le dije: -Gracias, mami, soy la hija más afortunada del mundo. - Y nos abrazamos. Nuestros pezones duros quedaron pegaditos y la tensión sexual se fue al máximo, mire su colita paradita y sensual a través del espejo, no aguanté y puse mis ...