La dependienta me quiso chantajear (IX) La boda - Relatos Eróticos

La dependienta me quiso chantajear (IX) La boda

... fijara en ella, pues sin ser exagerada se le veía satisfecha con ese poder, el cual explotaba muy bien, y si algo he aprendido en mi experiencia como Amo es a reconocer a una igual, y ella era como yo, aunque no sabia si su dominación solo era social o iba más allá, pero si que lo iba a averiguar.

-Mó.-Le gusta la suegra de estas dos PUTAS.

Esto lo dijo pegándose a mi oreja y no era una pregunta era más una afirmación.

-Si Mó, pero no creo para nada que sea sumisa, más bien todo lo contrario.

No nos dio tiempo a más pues ya se forma tal pelotonera que casi no nos podíamos ni mover, y en ese momento se acerco Belén, a darme dos besos, y me gusto, pues vino a su Amo y no espero a que yo fuese a ella.

-Belén.-Gracias Señor, gracias, llevo mojada todo el día solo de pensar en hoy, y a la vez nerviosa porque todo salga como Ud., desea.

Como todo el mundo deseaba felicitarla no me dio tiempo a decirle nada, pero a ella si que le dio tiempo a darme un sobre, que la verdad no se de donde lo saco, ni me importa claro.

Retirándome un poco o mejor dicho un mucho, porque me agobian mucho estos eventos, abrí el sobre y vi dos llaves de hotel, ambas iban con una pegatina, en una ponía “Mi habitación”, y el número y en la otra a parte del número también ponía “Su habitación”, que no era otra que la contigua a la suya.

Yo de esto no sabia nada, pero me encanto el detalle, porque así podríamos empezar antes.

La celebración era en el hotel Nazaríes, un hotel de ...

... cinco estrellas superior, y yo deseaba empezar lo más pronto posible, pues si la novia llevaba todo el día mojada, yo llevaba toda la semana excitado.

Al final conforme se fue aclarando la cosa, y los novios se subieron a su coche para ir a hacerse las fotos de rigor, yo les hice una señal a Maite y Ángela para que se acercaran a nosotros.

Así que allí estábamos los siete, Ángela, Maite, Mó, Cristina, Irene, Manolo y yo, y en ese momento empecé a ejercer como lo que soy su Amo, pues también quería que Irene se fuese dando cuenta, pues yo quería ver si era Ama o solo socialmente dominante.

-A ver vamos a distribuirnos, Cristina coge las llaves del coche, y tú, Mó, Ángela, Irene, y yo nos vamos en el, y Maite y Manolo, que cojan un taxi, y como llegarais antes os esperáis en la puerta, no vayáis a entrar.

En ese momento Irene levanto la mirada hacia mí, y creo que fue la primera vez en toda la tarde que lo hizo.

Irene.-No te preocupes, nosotras cogemos un taxi, no hace falta…

-No estoy nada preocupado como Ud., vera, pero ya esta organizado y no acepto un no.

Esto lo dije mirándola a la cara y algo desafiante, y de reojo mire los gestos de Maite y Ángela, y a la primera parecía que le daba igual, pero en Ángela vi cara de miedo, y hasta de terror, como esperando que de un momento a otro su suegra saltara y lo estropeara todo.

-Irene.-Bueno si lo tienes así de claro vamos.

A mi se me escapo una pequeña sonrisa, sobretodo al ver la cara de alivio de ...