Soy Julia adicta al sexo y a la leche - Relatos Eróticos

Soy Julia adicta al sexo y a la leche

... pasaba por la cara, empecé a meterlo hasta donde pude, creo que la mitad llegaba ya a mi garganta hasta que me hacia toser!!  Lo masturbe con fuerza y fue cuando ese moreno se vino, unos corrientazos sentí dentro de mi, su leche estaba bien caliente y espesa, ya me estaba tomando mi segundo desayuno, me trague todo y le limpie hasta la ultima gota, el se acomodo su bestia en su pantalón y bajamos del carro, le dije que íbamos a cuadrar para estar juntos pronto.

Subí a la oficina, en algún momento me separe de Luis, para que la gente no hablara estupideces, en la empresa muchas mujeres me tenían envidia, yo era bastante reservada, me cogia al que me gustaba pero siempre buscaba buenas presas, y sobre todo hombres casados que no estuvieran hablando tonterías por los pasillos. Yo tenia mi oficina sola, y ese día estaba muy caliente, llame por la extensión a un compañero llamado Andrés, ya me había acostado con el como en 3 oportunidades, siempre en moteles. El fue a mi oficina, le dije que le pasara el seguro a la puerta, por su puesto el accedió, le dije: Quiero que me cojas aquí Andrés!!! Me baje en jean y me puse con las manos en el escritorio, Andrés rápidamente sin decir ni una palabra, se bajo el pantalón y ya su pene lo tenia apuntado hacia mi, me embistió por detrás y me lo metió hasta el alma de mi vagina, empezó a culearme rico, mientras yo estaba parada de espaldas hacia el, como a los 3 minutos Andrés no aguanto mas y me dijo que se iba  a correr, yo me voltee y ...

... me arrodille y por supuesto me iba a tomar mi tercer desayuno, Andrés se corrió en mi boca, su deliciosa leche lleno mi paladar, se subió el pantalón, le di una nalgada y salio de mi oficina.

Ahora mas calmada si decidí tomarme un café con unos panecillos, pase la mañana trabajando, pero pensando en Luis y su enorme pene. Le empecé a enviar mjes a su celular, le dije que si quería escaparse conmigo después de almuerzo, por supuesto no se iba a negar a comerse esta hembra. A eso de la 1pm, me fui a mi carro y el me espero afuera del edificio donde quedaba la empresa, lo pase buscando y nos fuimos directo a un motel, apenas entrando a la habitación nos empezamos a besar bien rico, Luis era un joven como de 25 años, tenia brazos fuertes y buena estatura, era un negrote lindo. Ese hombre me tiro en la cama desnuda y empezó a hacerme el sexo oral, quizás devolviéndome el favor, su lengua jugaba con mi clítoris, y se sentía genial, le propuse hacer el 69, entonces el se acostó y yo me subí encima de el, mientras el se comía mi cuiquita yo me devoraba su huevo, estaba demasiado rico, y mi mente perversa solo pensaba una cosa : - quería que me lo metiera por el culo!! A mi me encantaba el sexo anal, era un experta, y lo mas cercano al pene de Luis era un consolador negro que tenia en casa que ya me lo había metido por el culo en mis tiempos de ocio. 

Así que le dije a Luis que me lo metiera por detrás, saque lubricante de mi cartera y me puse en cuatro, el rápidamente me dilato ...