Mi sobrina me deja masturbarla - Relatos Eróticos

Mi sobrina me deja masturbarla

... gemidos de placer inmenso, justo como el que yo estaba sintiendo, así que le dije "te dije que te iba a dar todo el placer que tú te merecías mi preciosa" así que con mi mano le apreté fuertemente un pezón, se lo jalé hacia mí y le dije que por favor me dijera lo mucho que lo estaba disfrutando... Me dijo "ya, ya, ya" y le dije ¿Ya casi mi vida? Mira esto... Y de golpe le metí mis dos dedos en su anito. Ella grito muchísimo y yo no paraba de jalar su pezón, morder su clitoris y penetrarla salvajemente una y otra y otra vez con mis dos dedos... Estaba apretadisima y muy muy mojada, sus pezoncitos también estaban durísimos...
y pocos segundos después tuve mi muy merecida recompensa...
Un squirt delicisisimo en toda mi cara... Ella estaba sumamente apenada, quería hasta llorar, le dije que ella merecía todo ese inmenso placer, saqué mi verga que ya estaba muy muy dura y húmeda, ella se volvió a sentar y se bajó la falda, La jalé, y se quería bajar del coche, cerré los seguros, de una la cargue y de volada la enchufé en mi verga de una sola sentada, ella gritó como nunca, me apretó fuertemente de la espalda y yo me vine en ese momento dentro de ella... Se sintió apretadisima creo mi hermosa Anita era virgen, ella solo temblaba y lloraba, la agarré de la cara y le empecé a meter mi lengua a su boquita mientras arrancaba su blusa ella nuevamente se intentó quitar y se salió mi miembro, la volví a jalar pero en el forcegueo se enchufó en su anito... Ella gritó de dolor y comenzó ...

... a llorar enxima de mi, no pude más y como animal la sacudí de arriba hacia abajo , ella lloraba pero ya no se movía tanto, terminé en su anito mientras la movía de arriba hacia abajo, era muy delgada, así que fácilmente la podía cargar y montar a mi gusto, para esto yo ya tenía sus hermosos senos paraditos y desnudos en mi cara, ya no quise lastimarla y como ya me había dado placer con su anito quise consentirla y la volví a acomodar para penetrarla por su vaginita...
Mientras hacia eso ella solita se agarraba de mi cuello para moverse como la diosa que es...
Yo sabía que ella lo disfrutaba mucho así que le comencé a morder y succionar sus pezones, ella me quiso quitar y me volvió a decir que le dolía, le dije que solo la estaba consintiendo con placer extra, y seguí mordiendo sus pezoncitos hasta que se veían casi morados, me excitaba mucho sentir su vaginita suave y apretadita y dejarle mis dientes en sus pezoncitos, quien la viera desnuda. Sabría que ya tiene un dueño y alguien que la complace, así seguí como una hora, entre sus llantos y sus gemidos decidí volver a prender el asunto y la masturbé con mi linterna, era medianita y con el mango redondo, como del tamaño de mi miembro aproximadamente, le metí mi verga en su anito para volverlo a sentir y la linterna en su vaginita mientras le mordía sus pezoncitos...
Fue delicioso, al terminar ella quedó muy seria, le dije que si quería placer conmigo siempre lo tendría...
Me preguntó si lo haría otra vez.
A lo cual le ...