... ya empezaba a tener frío. Ademas, parece que Julian a partir de ese momento se ha centrado mas en lo que estábamos haciendo.
Las ocho, una tarde fructífera, hemos terminado el temario y ahora le queda solo trabajar en casa y para las próximas clases solucionar dudas.
Es sábado Julian, has quedado para salir? Llevas a alguna chica al cine?. Responde algo tímido, voy a seguir estudiando en casa. Sonrío, lo llevas muy bien, el descanso y la diversión también son importantes. Yo esta noche no voy a salir, quieres tomar algo antes de irte a casa. Venga, responde animado, no suelo tomar alcohol, pero me apetece una cerveza. mientras que sirvo la cerveza y una copa de vino blanco para mi, me quito la rebeca, saco todo al salón, y pongo un disco que el mismo me recomendó, Paco de Lucia el concierto de Aranjuez.
Me habla de como le va la carrera, de sus amigos, del tiempo que hace que no ve a su familia en el pueblo por la convocatoria de exámenes, etc. La charla es entretenida, pasa el tiempo sin darnos cuenta, se levanta y rellena mi copa y se sirve otra para el. Es un chico encantador, pienso, que pena que no tenga 20 años mas.
Noto que su mirada se pierde de vez en cuando, es algo a lo que estoy acostumbrada, es difícil que un hombre me mire directamente a los ojos en verano, aun mas, si tiene veinte años. Bajo un poco la vista y entiendo donde esta su problema, aunque el alcohol ya ha conseguido sonrojar mi cara, mis pezones están duros, marcados dentro del ...
... sujetador.
Termina la copa de vino y se le nota mas deshinibido, se atreve a preguntarme por mi marido, me encuentro bien con el, estoy pasando un buen rato, y no me cuesta contarlo. Lorenzo y yo decidimos separarnos hace un año, bueno, mas bien, lo decido el, yo tuve que aceptar, la verdad que cada vez lo llevo mejor, en mi cabeza resuena la voz de mi yo interior diciendo: mentira, no te atreves a contarle a un jovencito que estas perdida desde hace una año y me cierras el pico con alcohol . Aprovecho el momento y le pregunto por su novia, algo ya me había contado sobre ella, una chiquita del pueblo con la que llevaba varios años, me dice que decidieron dejarlo, no llevaban bien la distancia y les generaban muchas discusiones pero, según el, esta bien.
Mal ejemplo te estoy dando Lorenzo, tengo 20 años mas que tu y los mismos problemas amorosos aunque, sonrío irónica, no es lo mismo un jovencito como tu que una señora mayor como yo. Ante este comentario, me mira con cara de sorpresa, no digas eso con lo atractiva, guapa e inteligente que eres, cualquier hombre de cualquier edad se enamoraría de ti.
En ese momento no pude callar a la chica traviesa que llevo dentro. ¿Cualquier hombre? Pregunto. Por supuesto responde él. Sonrío acariciando su mejilla, ¿tu? por ejemplo. Tal vez envalentonado por el alcohol, sonríe y mientras se acerca a mis labios, responde, yo seguro.
Note como sus labios se posaban sobre los míos, suaves, sabiendo lo que hacen, respondo casi por instinto, ...