1. Una noche con Valeria


    Fecha: 25/08/2022, Categorías: Lesbianas Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    ... deseaba
    
    Comenzó hacerme un rico sexo oral, su lengua enrollada entraba y salía de una forma majestuosa, me apretaba las tetas con fuerza, su nariz prácticamente entraba en mi vagina también, yo estaba gritando del placer, ella sabía dónde chuparme y lamerme, ¡ese sexo oral es hasta la fecha el mejor de mi vida!
    
    Yo: ¡Dios mío amiga que rico!
    
    V: Disfrútalo nena te voy a hacer gozar.
    
    Yo: ¡Sigue así, sigue!
    
    V: ¡Me pone a mil lo que dices!
    
    Ahora no solo su lengua entraba y salía también sus dedos ya jugaban dentro de mí, apretaba mi clítoris tan rico que me hacía zangolotearme del placer, le pedí se subiera en mí, quería devorarla yo también, nos acomodamos en un 69 delicioso, ella me dejaba su vaginita depilada y escurriendo de la excitación y un tremendo par de nalgas, redondas blancas y grandes, comencé a darle lamidas en sus labios vaginales, mis manos apretaban con fuerza sus ricas nalgas, ella movía su cadera mientras mi lengua poco a poco entraba en ella.
    
    V: Que rico amiga, lámemela rio por favor.
    
    Yo: Que conchita más rica tienes nena, me la comeré enterita.
    
    Mis dedos apretaban su jugoso y rico clítoris, ella gemía exquisito y me prendía más, nos metíamos el dedo tan rico que escurríamos del placer, Valeria estaba tan cachonda que comenzó a lamerme el ano, su lengua estaba en mi ano y sus dedos en mi vagina yo procedí a hacerle lo mismo, su rico ano recibía mi lengua y su vagina sentía la velocidad de mis dedos.
    
    V: ¡Ah que rico lo hace nena ...
    ... ah!
    
    Yo: Estas riquísima Valeria y pensar que pudimos hacer esto desde hace tiempo
    
    V: Si mamacita solo que antes eras fresa jajá
    
    Yo: Jajá ahorita vas a ver como esta fresa te hace jadear zorra.
    
    V: Si Lety soy tu zorra.
    
    Valeria me abrió las piernas y se acomodó para que empezáramos ajuntar nuestras húmedas vaginas, ambas movíamos nuestras caderas con movimientos que harían venirse a cualquiera, el sonido que provocaban nuestras conchas al juntarse era música para mis oídos, nos apretábamos las tetas, yo pellizcaba el gran pezón de Vale y ella me mordía mis pies, al parecer tenía el fetiche de los pies ya que no deja de lamerlos y besarlos, nos tomábamos del trasero y continuamos entrelazadas meneándonos placenteramente.
    
    V: Que rico te mueves, con razón muchos están locos por ti.
    
    Yo: Tu igual amor, que ricos movimientos, eres un deleite sexual.
    
    Tuvimos un rico orgasmo juntas, pero Vale quería aprovechar que estaba conmigo y yo igual quería gozar su cuerpo, la acosté en la cama y comencé a besarle sus grandes tetas, mi lengua se deleitaba con su gran pezón color claro, lo mordía mientras ella me acariciaba las nalgas y se abría de piernas como si la fuera yo a penetrar, nos acomodamos de una forma que nuestras vaginas seguían rosándose deliciosamente, yo mordía los pezones y simulaba una penetración, ella movía rico su cadera y me apretaba con fuerza mis nalgas, nos besábamos salvajemente, le levante las piernas de manera que sus rodillas llegaban hasta su ...