Campamento con mi tímida novia (Final)
Fecha: 05/06/2022,
Categorías:
Intercambios
Autor: Homelander, Fuente: CuentoRelatos
... lago cristalino, un jardín enorme, pero sin duda más agreste y “salvaje” que dónde estábamos.
Yo: ¿Por qué no acampamos aquí? Esta genial – dije viendo el lugar mientras él se detenía
Randal: porque Carlitos quería cabañas – decía sarcásticamente
Yo: igual te cogiste a su pinche novia culona Tiffany – dije cruelmente, un comentario que no venía de ningún lado y a ningún sitio, los 3 reíamos
Randal: y vaya que me la cogí… - los 3 reíamos más – pero tú novia da mejores mamadas y tiene la panocha más apretada – ella le golpeaba el hombro riendo histérica.
Bajábamos del auto y colocábamos una hielera y un mantel sobre el pasto del jardín, no quisimos colocar más, era domingo, teníamos que regresar ese día a la aburrida realidad, solo estaríamos unas horas ahí. Nos sentábamos en el mantel dejándola a ella deliberadamente en medio de nosotros 2, la situación era tan morbosa.
Ellos comenzaban a besarse y yo disfrutaba observándolos, ya no me importaba, disfrutaría sin culpas. Él le retiraba el brassier y luego el bikini.
Randal: tráeme un lubricante de mi mochila – me decía tranquilamente, yo me puse de pie de inmediato, ella me jalaba del short
Alejandra: ¡No! – decía riendo nerviosa y viéndolo
Randal: tú tráelo.
Me decía sonriendo, me solté del débil agarre de ella mientras reía nerviosa, fui al auto, busqué en la maleta, no fue difícil, un bote enorme y transparente lleno del típico líquido acuoso, volvía y él seguía sentado y ella tenía ...
... la cara hundida en su entrepierna. Disfrutaba la vista de mi novia complaciéndolo con la boca y le daba el bote, ella lo notaba y alzaba la cara.
Alejandra: no pasará – decía riendo y regresando de inmediato a chupársela
Randal: ya veremos – reía mientras empujaba la cabeza de mi novia.
Me senté a ver cómo lo complacía, me saqué la verga y me masturbé sin vergüenza, me encantaba ver cómo ella en serio se esforzaba yendo hasta abajo en su verga, ver cómo abría la boca exageradamente y ese enorme pedazo de carne oscura abarcaba toda la boca de mi novia era increíble. Él gemía y la llamaba “zorrita”, ella daba arcadas y la saliva escurría escandalosamente.
Él se ponía de pie, yo estaba sentado, la puso en cuatro patas con su linda cara apuntando hacia mí, ella abría los brazos dejándome en medio y yo me acomodaba dispuesto a disfrutar el espectáculo mientras él se ponía de rodillas detrás de ella y le separaba sus lindas nalgas mirando suciamente su pequeño y rosado coño.
Randal: no te ofendas, pero este es tu mejor ángulo – le decía y los 3 reíamos.
Era increíble como había cambiado todo en esos pocos días, básicamente un desconocido tenía desnuda en cuatro patas a mi novia y literalmente le decía que se veía mejor en cuatro patas que de frente y lo tomábamos como un cumplido. Ella me veía intensamente mientras Randal le comía el culo obsesivamente, ver su cara metida por completo en su lindo y pequeño trasero era asombroso.
Yo: te amo – le dije ...