(3) Farsas desconectadas
Fecha: 18/06/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Caminante, Fuente: CuentoRelatos
... He pensado que debo empujarte, aunque he perdido interés por la foto, estoy pensando que me la metas ahora mismo, y olvida a mi familia, no vendrán ya que suponen que vamos a follar y seguro que se marchan a comer por ahí.
- ¿Y esta urgencia?
- ¡Vamos tío!, estamos desnudos y tenemos una cama en condiciones, también hace buena temperatura. ¿Qué más necesitas?
- Que dejes de empujarme. Y me gustaría que me explicaras como quieres y manera de ser desvirgada.
- ¿Cómo si fueras un autómata?
- Sí, exactamente eso, que no tenga que pensar.
- ¿Utilizarías algún ungüento para penetrarme a saco?
- Eso lo decides tú.
- Empiezo a comprender, esto es como una obligación y empiezo a pensar que no soy de tu agrado, ni física ni psíquicamente ¿es así?
- Tienes prisa y te da igual el procedimiento.
- ¿Te pasó lo mismo con MC?
- No, a pesar de mi ignorancia, esa pueblerina tuvo y tiene mis respetos. Fue un beso casi robado, ya que al principio rehusó separar los labios y fue la llave de acceso. Cuando lo conseguí, ella se puso muy nerviosa a pesar de que fue un beso de ignorantes, más ella que yo, el morrearse no es tan complicado al principio, pero a ella la turbó, y la noche siguiente, mientras me ponía un café, me confesó que sintió mojada y una sensación de calor en el vientre, se alteró de tal forma que aquella noche apenas pudo conciliar el sueño.
- Dispuesta, eso fue lo que conseguiste, pero ella no supo verlo, como yo ahora, además me jode que me ...
... hables de otras mujeres, no te dije que soy muy celosa.
- Después de cerrar, le dijo a su tío que íbamos a dar un paseo y que en diez minutos volvía, me miró ceñudo pero no dijo nada y salimos al frío de la noche, casi la una de la madrugada, volvimos al mismo lugar de la noche anterior, en la entrada trasera del restaurante, fuera de la vista de todo el mundo, esa entrada daba al campo a una zona arbolada y - me cortó.
- ¡Ya! No te anduviste con remilgos y se la metiste.
- No, no soy tan burro, no, ella quiso mejorar el beso y que había puesto oposición, a pesar del temor, ya que pensó que venía después del beso.
- ¡Qué paleta! – Exclamó.
No, yo no pensaba que se alterara más, ya que estaba muy nerviosa, y nos besamos, esta vez sí conseguí que su lengua dentro de mi boca y se alteró más de lo que pensaba, no sabía respirar. Le expliqué como hacerlo y poco a poco se fue tranquilizando.
Y en un momento de respiro le pregunté si estaba mojada, asintió mirando al suelo, le dije que había que dar un pequeño paso adelante y me miró alarmada, le dije que solo soltarle el sujetador, se envaró y preguntó que había después, le dije que nada más, mis manos estarían en su espalda, nada más.
Me confesó que estaba aturdida y se encogió, dijo que estaba sudando ante el temor que la dejara embarazada, se temía lo peor, que la iba a follar sin más.
Le dije que no, que eso solo estaba en su cabeza, en realidad mi intención era acariciarla los pechos, y de su respuesta ...