1. El fotografo


    Fecha: 03/05/2018, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... apretar tu duro culo,cuya bonita silueta se mostraba en la forma que tomaba tu vestido. Con la mano, tu marido,apretaba tu culo, y lo magreaba, mientras tu te apretabas contra él restregando tu cuerpo conpasión.Yo comencé a sacar fotografías, me movía alrededor vuestro, disparando con mi cámara,tomando primeros planos de vuestras bocas besándose, o de la mano de tu marido en tu culo.Llamaron a la puerta con las bebidas, y os hice una seña de que siguierais, que ya iba yo. Abrí yrecogí la bandeja. La dejé sobre la mesa de la habitación. Tu ya le habías quitado la camisa a tumarido, y besabas su pecho.Parasteis un momento, os pasé las bebidas y brindamos los tres. Disteis un sorbo y volvisteis adejar la copa. Rápidamente volvisteis a lo vuestro. Tu marido te quitó el vestido, dejando a lavista un precioso conjunto de ropa interior blanca, con encajes, y trasparencias, que hacía quela imaginación se desatara. Te sentó en la cama, y tu pasaste tus manos abrazándole, yagarrando su culo. Le apretaste contra ti, y besaste el bulto de su polla, que resaltaba en elpantalón. Yo seguía moviéndome alrededor vuestro, disparando la cámara, tomandoinstantáneas de todo lo que hacíais. Cuando hacía un primer plano de ti besando el bulto delpantalón me miraste y guiñaste un ojo, traviesa, mientras sonreías.Desabrochaste el pantalón de tu marido, e inmediatamente su polla saltó, ya que no llevabaropa interior. Estaba dura, enorme por la excitación. Exactamente igual que yo, que ya tenía ...
    ... lapolla a punto de reventar.Le bajaste el pantalón y pasando tus manos por detrás empujaste su pelvis hacia ti, metiendosu polla en tu boca. Introduciéndola de una vez hasta dentro, hasta que sus bolas chocaroncon tu barbilla. Comenzaste una mamada que hizo que a tu marido los ojos se le pusieran enblanco. Metías y sacabas la polla, moviendo la cabeza adelante y atrás, sin usar las manos. Eraincreíble la capacidad para meterte esa polla en la boca, y chuparla como una profesional. Lasacabas y con la lengua saboreabas el glande de esa polla, que estaba enorme, a punto de
    
    estallar. Volvías a meterla, y tu boca engullía todo ese pedazo de carne. La polla llegaba hastatu campanilla. Yo tomaba fotos sin parar, no me podía creer lo que estaba viendo. Eras unaexperta mamando, y tu boca era una boca de diosa, capaz de dar placer sin límites. Cuandohacía primeros planos de tu boca llena de polla tus ojos chispeaban y mostraban lo queestabas disfrutando. Además, el tenerme allí observando y fotografiando te teníasobreexcitada, que era de lo que se trataba.Tu marido se dejaba hacer, tu sacabas la polla de tu boca y pasabas tu lengua por todo eltronco, llegando a los testículos, que chupabas, y saboreabas, incluso introduciéndolos en tuboca, primero uno y después otro, haciendo que se pusieran duros y firmes, llenos de ricosemen que esperabas saborear antes o después.Tu boca chorreaba saliva, que no podías aguantar al tener la boca llena.Tu marido no podía aguantar más, pero lo último que ...
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