A lo mama - Relatos Eróticos

A lo mama

... monte de Venus apenas cubierto por una suave y delicada bombacha rosada, suspiro y movió su cadera presionando mi pene que ya se encontraba duro y lleno de leche en honor a ella, viendo que seguía teniendo su complicidad , pero también sin querer faltarle el respeto le pregunte si le molestaba, respondió que no y dijo que era raro que yo estuviese vestido, invitandome con este comentario a quedar desnudo frente a ella como era mi costumbre hacerlo, automáticamente me saque la remera y el bóxer que traigas puesto, quedando completamente desnudo frente de ella, con la chota dura invitandola a amarnos, ella no quitó su mirada de mi pija más que para mirarme a la cara directamente a los ojos, siempre había sido mi fetiche estar desnudo frente a ella, me encantaba que me pudiera ver y sentir esa sensación de lo prohibido y su complicidad. Ella continuaba con su bata, y yo viviendo la experiencia más extraordinaria de mi vida, pero siempre dejando que ella guíe y lleve el compás, no quería por nada del mundo que se enojara y no poder tener más esos momentos, después de un instante donde dejé que me vea bien, le dije si me dejaba verla desnuda, que era lo que más quería, y  si nos podíamos bañar juntos como antes, que lo extrañaba, ella respondió feliz que si, y pregunto ¿ahora? , pero que recuerde la regla de no contarle a tu padre y me guiño el ojo. Tomo el cinto de su bata y lo soltó, para sacárselo lenta y sensualmente, quedando en corpiño y bombacha frente a mi, yo miraba ...

... impactado y seguía cada movimiento que ella realizaba, se dio vuelta, dándome la espalda, para desabrochar el corpiño en una actitud de timidez, en ese momento pude ver como su diminuta bombacha se enterraba entre sus nalgas haciendo que se vea aún mejor su cola blanca, redonda y pulposa, una vez que se desabrochar el corpiño, quedo de espada , solo cubierta por la bombacha, esto fue una invitación para que me acercará , así que volvi a abrazarla por la espalda yo  desnudo completamente, y lleve mi mano hasta su vientre para luego ir bajando y llegar a meterla adentro de su bombacha donde puse sentir los suaves pelos de su hermosa concha que rozaban entre mis dedos, ella con su silencio me invitaba a continuar, yo intentando no romper el clima apoyé mis manos en su cadera para comenzar a baja su bombacha permitiendo que aflore su desnudez,  en un movimiento continuo la pude bajar hasta sus tobillos impidiendo  que se arrepintiera y la subiera nuevamente, pero lejos de eso levantó cada uno de sus pies para que se la pudiera quitar completamente, estando los dos en la cocina completamente desnudos la miré sin perder detalles de su cuerpo, mi cara lo demostraba todo, esto a ella le encantaba, se volvía a sentir viva después de tantos años de rutina y descuido de mi padre… irónicamente y con su hermosa sonrisa cómplice me pregunto si me gustaba verla asi, yo no podía dejar de apreciar cada detalle y centímetro de su cuerpo, mi mirada de amante lujurioso invadía su cuerpo solo para ...