El calvario de Luciana (4)
Fecha: 27/11/2017,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos
... –dijo Dany, que era homosexual y un apasionado de la fotografía. –Cuando quieras empezamos.
Fueron varias las poses en las que Dany fotografió a Luciana, que aparecía siempre mirando a la cámara: de rodillas, sin apoyar las nalgas en los talones y sosteniéndose los pechos con ambas manos; echada en la cama de costado, con una pierna semi encogida; en cuatro patas, y echada con las piernas abiertas y flexionadas, mostrando su conchita virgen.
Finalizada la sesión, Dany le mostró a Emilia las imágenes en su cámara digital, varias tomas de cada pose y en todas había algo de turbador en la mirada de la jovencita, que de tan perdida aparecía como excitante, con una sensualidad muy especial. Para el fotógrafo ese cuerpo no era sino un bello objeto que él optimizaba con su arte.
-Perfectas, Dany, ¡perfectas!, como siempre. –dictaminó la proxeneta. –Mandámelas todas en cuanto llegues a tu casa. Yo elijo una o dos de cada pose, armo el boock y lo mando a toda la clientela.
-Despreocupate, en una hora tenés las fotos.
Dany cumplió su promesa y una hora más tarde Emilia, sentada ante la computadora en su oficina, miraba una y otra las imágenes encontrándolas muy estimulantes. Luciana realmente había sido retratada en toda su belleza, realzada por el arte de Dany, que había iluminado con maestría y sensibilidad y encontrado el segundo exacto para disparar.
Emilia, en su escritorio y tras un exhaustivo análisis de las fotos, eligió cuatro que mostraban a la jovencita en ...
... distintos ángulos y permitían apreciarla en todos sus encantos.
Sonrió satisfecha y se puso a la tarea de armar el mail que enviaría a toda su clientela, mientras sentía que las imágenes la estaban excitando y dándole ganas de una buena sesión con la pichona.
“El trabajo es lo primero. –pensó. Pero en cuanto termine…” y dejó la frase en suspenso para empezar a escribir el texto del correo:
“Estimadas y estimados, les adjunto fotos de mi nuevo ejemplar, Luciana, 19 años, virgen. Hagan sus ofertas a partir de una base de 5.000 dólares y sabiendo que el ganador tendrá derecho a disponer de la pichona durante toda la noche.
Saludos.
Señora Emilia.”
Inmediatamente después de haber enviado ese mail a toda su clientela Emilia llamó a Luisa a través del botón que le permitía mantenerse en contacto con todo su personal en el momento en que lo deseara. Cuando la mucama compareció le dijo: -Hacele tomar una buena ducha a la pichona, que se lave la cabeza, le ponés una enema y me la llevás a mi dormitorio.
-Bien, señora. –fue la respuesta de Luisa que se encaminó en busca de Luciana no sin antes pasar por cierto cuarto donde se guardaban ciertos elementos como un equipo de enemas. Salió con él y en la heladera de las dependencias destinadas al personal de servicio buscó una botella grande agua mineral.
Luciana reposaba en la cama, tranquila y con los ojos cerrados. Los abrió al entrar la mucama y al verla dijo con tono monocorde y arrastrando un poco las palabras: ...