Paseo por la tarde - Relatos Eróticos

Paseo por la tarde

Quiero confesar que esto me sucedió a mí hija de 19 y a mí. Personalmente me excita mucho recordarlo!! 

Yo tengo 46 años. Soy delgada, mido 1.75 mis tetas son pequeñas pero son de caderas anchas y un trasero un poco levantado. Mí hija muy linda. Pelo largo y liso, cara muy bella casi de mí estatura con unas piernas muy largas. 

Íbamos de camino a esperar el autobús que nos llevara hacia el centro comercial, eran como las 5 de la tarde. En eso nos alcanza un autobús lo manejaba un tipo muy agradable que ya conocía de vista. Nos comenta que no llevaba viaje pero que igual nos llevaría a lo que accedimos sin dudarlo pues me inspiraba confianza. 
Lo que no me percaté es que en la parte de atrás iban cuatro tipos quienes al vernos les brillaron los ojos. Parecía que habían visto un par de monedas de oro... Al momento me quedé tranquila y no pensé que algo malo nos pasaría... Pero los tipos obligaron al chófer a llevar el autobús a un predio baldío acto seguido sacaron unas cuerdas y nos amordazaron a ambas incluyendo al chófer. No pusimos resistencia ya que de los cuatro tipos dos de ellos traían armas de fuego y los otros dos unas navajas... Después de que nos tenían sometidas a mí hija la tenía sujetada uno de ellos sin causarle daño. Pero tres de ellos se abalanzaron sobre mí con amenazas de que si yo colaboraba nos dejarían ir sin causarnos mayor daño.

Yo asentí con la cabeza en señal que entendía lo que pasaba. Acto seguido un tipo me rompió la blusa que traía ...

... puesta llevando su navaja hasta mi falda dejando mí cuerpo solo con una tanga rosa y mí brasier del mismo color. Se me pusieron duros mis pezones a lo que los tipos se comenzaron a burlar y a ultrajarme y me arrancaron toda mí ropa dejando mí cuerpo delgado expuesto a merced de ellos incluyendo al chófer... Mí hija lloraba pero le habían amarrado la boca para que no gritara. Entonces comenzaron a desvestirse y sacaron sus vergas que creo que de ver mí cuerpo delgado se habían excitado pues la traían duras como hierro. Eso me excitó mucho que deseaba que me clavaran de un sólo golpe aunque mí hija me viera comiendome esas vergas de esos tipos desconocidos de igual forma no quería que a mí hija le pasara algo.
Uno de ellos parecía el líder me puso su gruesa verga en mí boca y me puso la navaja en mí cuello para obligarme a que se la chupara. Sentí tan rico pues mí marido ya no me hace suya como antes. Y con gusto se la comencé a chupar desde arriba hacia abajo el tipo sentía tanto placer que me la metía hasta el fondo de mí garganta. Vaya que hacía tiempo no me agarraban así!!! Mí hija no daba crédito a lo que yo hacía. Pero creo que entendía que yo lo hacía para que todo eso terminará rápido. 
La verdad yo lo estaba disfrutando tanto que sin que me dijeran más nada busqué la verga de los otro dos tipos las cuales estaban súper duras. Yo las quería dentro de mí y sin pensarlo tanto uno de ellos se puso entre mis piernas por la parte de atrás y comenzó a cogerme por mí rajita. ...