1. Un viaje a todo dar…


    Fecha: 14/05/2021, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Camaleona34, Fuente: CuentoRelatos

    ... conversábamos de no sé qué tema porque con lo tomados que estábamos hasta hablaríamos pistoladas, en un momento me dijo que le hiciera compañía en su hamaca porque estaba haciendo mucho frío, me hice del rogar por unos minutos hasta que accedí, cuando me pase para su hamaca me dio un beso sin mediar palabras, muy buenos sus besos (confieso que soy adicta a los buenos besos), empezó a tocarme y cuando tomo me pongo como gasolina cerca de un fosforo, me excite demasiado y el noto la necesidad que tenía en ese momento, bajo hasta mi abdomen y luego hasta mi vagina, toco muy sutilmente mi clítoris luego bajo un poco mas y metió un dedo dio un respingo leve estaba muy cerrada porque hacía más de 3 meses que no tenía relaciones él me susurro al oído que le encantaba lo cerrada que estaba y que eso lo excitaba mucho. Metió otro dedo y metía y sacaba yo sentía que estaba en el aire no me acordaba el sitio donde estaba, tapaba mi boca y ahogaba mis gemidos lo mas que podía, baje mi mano hasta su miembro y cuando lo toque era inmenso de esos que solo te hacen legan con medio insertar la punta, me encanto porque era el primer hombre después de mi ex pareja que conseguía con el tamaño perfecto; le acaricie la punta con mis dedos y le hacía presión en su agujero los ojos le brillaban, me miraba con una lujuria feroz y muy ardiente, saque su miembro de su bóxer y lo masturbaba primero lento y cuando no lo esperaba lo hacía fuerte gemía como loco, me dijo muy bajito en el oído: “No sabes ...
    ... cuánto te deseo y te he deseado, me enloquece verte caminar y admirar tus hermosas nalgas, déjame penetrarte y hacerte sentir placer, por favor,”, yo me enloquecí muchísimo lo bese apasionadamente dándole respuesta con mis manos sobre su ropa, quitándosela el me quito el short que cargaba y luego arranco de un tirón mi hilo metió de un solo golpe su enorme miembro y yo sentí que me estaba elevando al séptimo cielo, me embestía con mucha fuerza y cuando casi terminábamos sentimos que alguien se acercaba y la mayor sorpresa era nuestro jefe afortunadamente él se dio la espalda y con su cuerpo me tapo el estaba desnudo y el jefe le jugó una broma yo estaba que me quería como morir, esperamos un tiempo prudente para yo levantarme hasta mi hamaca tenía una pena enorme, no sabía como mirar a mi jefe porque automáticamente la única mujer que quedaba allí era yo y por supuesto el no es ningún tonto, me acosté pasando el susto y recordando aquel encuentro que había sido frustrado pero que me había llenado de tanto placer, me dormí inmediatamente, a la mañana siguiente me levanto unas risas era mi jefe gastándole bromas a Carlos pero nunca escuche que me nombraran me dio un respiro de tranquilidad, me hice la loca y me reía de los chistes que hacía y el ponía cara de serio pero al final se reía también.
    
    Después de ese día mas nunca hemos ni siquiera tocado el tema, pase meses masturbándome en casa recordando ese encuentro que me dejo sedienta, como el viaje se hace anual estoy ansiosa ...