Visita a los aseos públicos de Fernández Latorre
Fecha: 28/03/2021,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: danisampedro91, Fuente: CuentoRelatos
... mismo, una vez lo hubo desabotonado, dejó que fuera cayendo a mis tobillos, me subió luego la camiseta que llevaba puesta, me la quitó por la cabeza dejando que callera al suelo. Echó sus manos a mis pezones, empezando a pellizcarlos y retorcerlos. Vio que los tenía duros y excitados y que yo me dejaba hacer sin decir ni hacer nada.
Se bajó el pantalón del chándal que traía junto al slip, dejando al aire su polla y huevos permitiendo que yo llevara mi mano hacia ellos, empezando a acariciarlos. La polla que tenía era una polla normalita al igual que la mía, y mientras yo le acariciaba los huevos y meneaba su polla, él llevó sus manos a mi slip, bajándolo y dejando que callera junto a mi pantalón a la altura de mis tobillos.
Sin decir ni pronunciar palabra alguna, me acarició los huevos y viendo lo empalmado que estaba, me descapulló la polla y mirándome a los ojos, mientras con una mano me iba meneando la polla, llevó su boca hacia la mía, posó sus labios junto a los míos, sacó su lengua pasándola por mis labios los saboreó, metiendo luego su lengua en mi boca, empezando a saborearla con desesperación y de forma salvajemente, como si el mundo se fuese a terminar.
Se notaba la excitación y deseo que teníamos ambos, así como el hambre de sexo que despedíamos los 2 allí abrazados, comiéndonos la boca salvajemente. Mordió mis labios hasta dejarlos enrojecidos e hinchados, luego fue bajando por mi cuello, cosa que me hizo estremecer y soltar un leve gemido y hacerme ...
... temblar abrazándome más a él. Llegó a mis pezones los cuales mordió y succionó, volviendo luego a subir hasta mi cuello dándome suaves mordiscos, haciéndome estremecer y temblar de nuevo. Vio el placer que me hacía sentir al morderme el cuello por lo que se paró allí haciéndome temblar de gusto, hasta que con sus manos me fue agachando hasta que estuve a la altura de su polla. La sujeté con mis manos, y acariciándole los huevos, llevé mi boca hacia ella, le pasé la lengua por el glande que se asomaba por la piel del prepucio, y después de saborear con la punta de mi lengua, metí aquella polla en mi boca, empezando a succionársela y lamerla en toda su extensión.
Después de un buen rato chupándole la polla y acariciándole los huevos, me hizo levantar, volvió a comerme la boca, labios y cuello. Me estaba haciendo temblar mientras me abrazaba a él gimiendo desesperadamente, y susurrándome al oído, me habló por primera vez. Date la vuelta, dijo ayudándome con sus manos a que me girara, quedando mi cara contra la pared.
Levantó mis manos apoyándolas en la pared de aquel aseo, y sujetándome por la cintura, llevó mi culo hacia su pelvis, me hizo encorvar un poco poniendo una de sus manos en mi espalda, Luego mojó su mano con su saliva, la llevó a la entrada a mi ano pasándola por mi esfínter, metió uno de sus dedos en mi culo y como entró sin dificultad, colocó la punta de su polla en él, y dando un movimiento a su pelvis, me enterró toda la polla en el culo.
¡Ohhh! ¡ooohhh! Gemí ...