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madre golosa
Fecha: 05/10/2017, Categorías: Tabú Autor: ferrdum678, Fuente: xHamster
Madre hambrienta y complaciente Acababa de llegar a casa tras una intensa mañana de trabajo en el hotel y después saludar a su hijo, plantado frente al televisor viendo los Simpson, se metió en la cocina a hacer de comer.-¡Francis! – llamó Isabel a su hijo cuando la comida fue puesta en el fuego. - Ven a la cocina y échale un ojo al sofrito mientras me ducho.Ambos se cruzaron en el camino, Francis se puso a remover la comida mientras que su madre subía a la planta de arriba. Se metió en el cuarto de baño y comenzó a llenar la bañera de agua a la vez que se quitaba el uniforme de trabajo que año a año lo encontraba más incómodo.Cuando quedó completamente desnuda se detuvo un momento mirándose en el espejo. El corte de pelo de la semana pasada le quedaba muy bien, y ahora que se acercaba el verano era más práctico que la melena larga que lucía el resto del año. Se escrutó el rostro buscando arrugas y estragos causados por la edad, pero sus cuarenta y cinco años la estaban tratando bien aunque no así de bien la trató el embarazo de Francis, ya que a pesar de haberle agrandado los pechos éstos se habían caído levemente y unas finas estrías habían aparecido en la parte superior de sus muslos, pero esto no le impedía estar orgullosa de sus piernas fuertes y bien formadas.Dándose la vuelta para mirarse el culo, se lo agarró y comprobó que la celulitis se había abierto camino en él lo mismo que en la barriga. Había conseguido recuperar parte de su forma anterior, pero no toda y eso ...
... la m*****aba.Había engordado unos doce kilos tras su divorcio. Éste había sido muy traumático no sólo para ella sino también para Francis que por entonces contaba con apenas diez años. Su matrimonio derivó en varios años de infidelidad por parte de su marido, un divorcio de casi tres años de juicios por repartición de bienes, una depresión que la hizo engordar y casi perder su trabajo, todo ello en plena adolescencia de su hijo, quien en los comienzos de su desarrollo físico y mental que le haría un hombre se encontró viviendo en un ambiente turbio y sin autoridad ni guía alguna sobre él.Con ayuda de algunos familiares y un profesor de su hijo consiguió a tiempo que su hijo no se maleara ni mezclara con los malos ambientes que empezaba a rondar en clase. Esta vigilancia sobre él también la ayudó a ella a salir de su depresión al tener un objetivo. Así se dedicó de pleno a su hijo para tratar de enmendar esos primeros años de divorcio, mimando en ocasiones a Francis de forma excesiva.Ahora el ambiente era mucho más tranquilo, todo se había estabilizado. Ella recuperó parte de su peso y ánimo original, su hijo volvía a centrarse en los estudios y en los amigos de siempre, el trabajo iba bien. Tras la tempestad había llegado la calma.Tras el examen anatómico cerró el grifo de la bañera y se sumergió en ella tumbándose casi completamente. Mientras se frotaba con la esponja se forzó por traer a su mente al grupo de jóvenes suecos que habían llegado esa mañana al hotel. Se trataba ...