1. Mónica, inicio inesperado


    Fecha: 15/06/2020, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Mamaceando, Fuente: CuentoRelatos

    ... excitaba, sentía como el vestido subía cada que movía el culo y ya no le importaba. Estaba disfrutando por completo y las botellas le ayudaron a relajarse. Terminó la canción y empezó a sonar “Bum Bum” de Die antwoord. Y ella ya casi en un trance, comenzó a quitarse la ropa. Todos a su alrededor babeaban, ahora podían ver ese culo al aire y lo festejaban. Cuando termino de caer el vestido, sus dedos fueros al botón del sujetados y callo dejando ver sus pechos duros, hermosos, divinos. Ella sonreía con su cara de niña traviesa. Al final se bajó la tanga y se agachó hasta quedar a gatas. Movía su culito y dejaba ver su hermosa y rosa panochita. Aquello parecía la celebración de un gol en el estadio. El DJ animaba y todos gritaban y aplaudían.
    
    Cuando bajo, sudaba y apenas podía respirar por la emoción. Nunca pensó que sentiría esa satisfacción quitándose la ropa frente a extraños.
    
    —¡que rica estas mamacita!
    
    Le dijo el DJ, luego se vistió en el pasillo ante la mirada perversa de los meseros y volvió a la mesa, totalmente excitada.
    
    —¿Porque te quitaste todo pendeja?
    
    —¡¿No es así?!
    
    —La tanga no, y hasta te empinaste cabrona.
    
    —¿Seguro que eres nueva?
    
    —¡PENDEJO!
    
    —Pero felicidades amiga, mira como los dejaste.
    
    Todos seguían mirándola, y dos botellas más llegaron a la mesa. Aunque muchos querían en su mesa a Mónica, los caballeros no dejaron de invitarles botellas y los ánimos se calentaban. Su amiga bailó y le pidió que pusiera atención. Se acercaba a ...
    ... las mesas y le ponían billete en la tanga. Así cuando volvió a subir Thalía, el salón estaba a reventar y los gritos eran ensordecedores. Thalía estaba más que borracha, y cuando tomaba, perdía un poco el control. Así que ahora las bocinas sonaba un “a mi me gustan mayores” como le prometió a su enamorado de hoy. Y meneaba las caderas de tal manera que todos aplaudían y chiflaban. Aún con vestido, los clientas le pedían que se acercara para colocarle billetes en la tanga. Y ella se empinaba por completo, para que el vestido se levantara hasta su cintura. Para cuando empezó “Darte” de Alex Rose, ella ya tenía llena la tanga de billetes de todas las denominaciones. Incluso algunas clientas le ofrecían billetes a cambio de besos y Thalía encantada besaba a cada chica que se acercaba. Termino la canción y el bullicio era incontrolable.
    
    —Para ser tu primer día, estás reventándola mamacita.
    
    —Y ahora no me encuere toda.
    
    —Lastima, estás bien rica.
    
    —¡Pendejo!
    
    La risa del DJ le daba la total aprobación, las miradas de envidia de las de las chicas y los piropos a su paso también. Era casi hora de irse, pero para ella apenas empezaba la noche. Cuando salió junto a su amiga, con la cartera llena de dinero, supo que ahí estaba la respuesta a sus plegarias.
    
    —¡No mames amiga, en un día me gane…!
    
    —No te acostumbres, hoy eres la novedad. Tienes que hacer clientes.
    
    En ese instante, mientras esperaban su taxi, una camioneta impresionante y lujosa se detuvo frente a ellas. ...