La niñera de los perros 1 - Relatos Eróticos

La niñera de los perros 1

... mientras su lengua se movía por mis su rosados pezones. "Déjame ver", susurré con vehemencia, con los ojos clavados en la parte inferior de su cuerpo. Lo empujé sobre su espalda y se quedó con su pene expuesto, todo rojo e hinchado. Toqué su pene con los dedos y Frisky hizo un sonido de placer muy profundo. Juguetona, curiosa y excitada, deslicé mi mano sobre su polla dura y la agité lentamente para obtener una idea de ella, se sentía bien en mi mano; para mi sorpresa, mis sentimientos fueron de atracción, era emocionante, mis ojos azules brillaron con picardía y me mordí mis labios nerviosa porque era la primera polla que habia sentido alguna vez. "Que rígida que es", dijé. Frisky quedó inmóvil, sus patas traseras estaban bien abiertas, miré sus pelotas y mis dedos siguieron mi mirada, jugué con sus bolas peludas por un momento, escuchándolo gemir reí y me excité aún más. Mi mano izquierda voló a mi coño caliente mientras mi derecha se movía por la polla roja y jugosa de Frisky se sentía caliente y mi coño se sentía cremoso. Riendo con entusiasmo, comencé a agitarlo más rápido, había oído de un montón de amigas acerca de cómo los muchachos eyaculaban, pero nunca había visto una corrida de verdad. "Te voy a hacer venir, ¿de acuerdo?". Frisky gruñó y gimió, se sacudió, su lengua colgaba de su boca y jadeó en busca de aire, la polla dura crecía y se alargaba, mis ojos permanecieron pegados a su polla mientras mi mano bombeaba. "Caramba, estas realmente caliente!". Le gustó ...

... lo que estaba haciendo con él, le dio una sensación de placer e hizo su pene más grande y rígido, Frisky hizo algunos sonidos roncos y comencé a agitarlo más rápido, su polla creció espesa y húmeda en mi puño y luego comenzó a sacudirse como un animal salvaje. El perro explotó en mi puño, se hinchó y se sacudió violentamente para escupir salvajemente grandes fajos de semen grueso, vino que sale a borbotones de la polla del perro, yo observé fascinada mientras disparaba su semen, enormes globos de materia blanca pulverizan sobre su pecho y cuanto más se agité, más se vino, mis ojos observaban la erección masiva de la bestia escupir tan violentamente. Ahora sabía lo que mis amigas estaban hablando, del perrito brotó esperma caliente y mi coño consiguió estar más caliente. "Vamos a tener un montón de diversión a partir de ahora", le dije. Me pusé de pie y establecí mi culo en el borde de un cojín del sofá. Inclinándome hacia atrás, saqué mi vestido sobre mi joven y planito vientre, abrí mis piernas ampliamente, y mi coño era agradable y caliente. Frisky levantó de un salto, también, ansioso por complacerla. Él empujó la cabeza entre mis muslos y atacó a mi pequeño y depilado coño con su hocico. Me mordió el coño hasta que pensé que moriría de placer, y cuando su escarpada lengua lamió mi clítoris, casi se desmayó en éxtasis. "Ohhhh, Friskyyyyy, Haslo, ven a miiiii! Ewwww, más, Frisky, más! Oh, ohhh, ohhhh, Voy a venirmeeeeeee!" El perro ansioso atacó mi coño con su lengua, mi ...