Una familia incestuosa
Fecha: 27/07/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Mago21, Fuente: CuentoRelatos
... desvistiendo me fijo en el cuerpo de mi hermana. No nos duchábamos juntos desde que entramos en el instituto. Ambos tenemos el cuerpo alto y delgado, los ojos los tenemos verdes y el pelo moreno. Yo siempre lo llevo corto y a ella le llega por los hombros. Sus pechos son medianos y con los pezones rosados. Mi hermana mayor y mi madre tienen los pechos más grandes y sé que eso siempre le ha molestado a mi melliza. Finalmente me fijo en su coño, con una fina línea de pelos.
Se gira y ve que no me quito los calzoncillos así que se me acerca y en un acto de sorpresa me los quita ella antes de que pueda detenerla. Mi polla salta erecta de mis calzoncillos. Mi hermana sorprendida retrocede un paso. Yo me la intento ocultar, pero es imposible, la tengo dura como una roca:
—No pasa nada -me dice- es normal que te pongas cachondo al ver este cuerpazo.
—Perdona no sé lo que me pasa.
—Déjalo. Vamos a ducharnos.
Se mete en la ducha y enciende el agua. Empieza a correr por todo su cuerpo y eso hace que me excite más aún:
—Vamos -me dice mientras coge la esponja- te vas a enfriar.
Le hago caso y me meto con ella en la ducha. Nuestra ducha en amplia y tenemos un banco al fondo. Mientras mi hermana se enjabona yo me meto bajo la ducha e intento pensar en otra cosa; pero ver como se pasa la esponja por sus pechos, por su coño, por sus piernas no me ayuda.
—Alvaro, me enjabonas la espalda que no llego.
Me tiende la esponja y empiezo a enjabonarla lentamente, ...
... recorriendo cada centímetro de piel, pero alejado un poco de ella. Le recorro la espalda bajando y subiendo hasta llegar a la parte que se junta con su culo. Cuando ya voy a terminar da un paso para atrás y la cabeza de mi polla toca sus nalgas. Eso hace que se me caiga la esponja. Se gira y ambos miramos hacia abajo sin saber cómo reaccionar. Al final es ella la que se agacha y la recoge. Veo como su mirada se posa en mi polla, erecta de 18 cm y con pelo coronándola. Se incorpora lentamente con la esponja en la mano y se acerca a mí. Nuestros cuerpos acaban juntos. Sus tetas están pegadas a mi pecho, su vientre roza el mío y mi polla se ha colado entre las piernas de mi hermana mientras noto el calor que sale de su coño. Tira la esponja al suelo mientras me mira a los ojos y, lentamente posa sus labios sobre los míos. Me sorprendí en un primer momento, pero deje que mi cuerpo tomase el control y respondí a ese beso. Nuestras lenguas empezaron a juguetear mientras la saliva fluía de nuestras bocas. Fue el beso más excitante que me había dado.
Cuando nos separamos recupere el aliento:
—A sido fantástico –le dije apoyándome en la pared.
—¿Te ha gustado?
—Sí, pero, esto es incesto, no podemos hacerlo.
—Ya. Pero no puedo aguantarme las ganas que tengo de follarte. Mira mi coño esta mojado y no es por la ducha -pasa su mano por su coño y lame sus dedos- y veo que tu polla dice lo mismo
Se vuelve a acercar y me muerde el labio lascivamente, luego baja por mi cuello, por ...