La evolución de Ana (1)
Fecha: 27/06/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: vladi, Fuente: CuentoRelatos
... calentita.
Le dije “Ahora te toca a ti darme un buen premio porque creo que me lo he ganado por partida doble”
“Es verdad me has hecho disfrutar dos veces como pocas veces he tenido tanto gusto en mi vida”
Dicho y hecho se agachó y se metió mi polla en la boca y empezó una mamada que, a decir verdad, demostraba que tenía experiencia. Con la mano que no me sujetaba la polla empezó sobarme los huevos y las nalgas acercándose a la rajita del culo, cuando lo noté me terminé de bajar el tanga me abrí más de piernas y le dije: “Anda méteme el dedo que lo estás deseando y yo también” no se lo tuve que repetir, me metió el dedo en el culo y siguió con la mamada consiguiendo que me corriera enseguida porque ya llevaba un buen calentón.
Nos limpiamos y nos fuimos a casa no sin antes quedar otra vez para hacerme una penetración anal. Como no era cuestión de darnos teléfonos quedamos que iríamos al mismo sitio cuando pudiéramos como hoy, los jueves a las 12 del mediodía. Nos despedimos y adiós.
Por motivos de trabajo no pude ir las dos semanas siguientes el día y hora acordados. Eso no quiere decir que no fuese otros días y ni ligase, pero no fue nada tan satisfactorio como el primer día.
Por fin el tercer jueves pude acudir a la cita a la hora acordada y la verdad es que estaba cachonda desde el día anterior. Pensaba que después de dos plantones no vendría, pero a las 12 en punto allí se presentó mi chico. No dimos unos besos de bienvenida y él se lanzó a desabrocharme ...
... y quitarme el sostén y a chuparme las tetas. Le dije que había traído lubricante anal para hacer lo que él tanto deseaba así que empezó a desatarse como un borrico. Me la quería clavar de cualquier manera “Oye, hay que buscar un sitio discreto y que nos permita hacerlo relajadamente además quiero que me trates con más delicadeza, como a una damita” Nos movimos un poco más adelante y encontramos una zona de matorrales muy adecuada.
Otra vez se puso muy burro y a mí me salió, sin haberlo preparado con anticipación, pero pensando que debía pagar por el gusto y las ganas “Ya que he venido por ti para que disfrutes, me gustaría que tuvieses un detalle conmigo, que me hicieras un regalito”
“¿Qué es lo que querrías?”
“Cincuenta euros estaría bien” le contesté, pensando que me iba a mandar a paseo. Pues no fue así, sacó la cartera y me dio un billete.
Nos bajamos del coche, fuimos entre los matorrales, solo me quité el tanga, pero seguí con liguero, medias y falda arremangada y nos estuvimos magreando un buen rato. Yo me lubriqué un poco y le pedí que me metiera un dedo, cosa que hizo de inmediato y estuvo jugando y haciéndome cosquillas en el ano hasta que ya bien calientes, le puse el condón, me di bien de lubricante y me puse a cuatro patas con las piernas bien abiertas para que me penetrase lo más fácil posible porque suponía que me iba a doler así que le rogué que me la metiera solo un poquito, que diera tres o cuatro meneítos y la sacara casi toda dejando dentro la ...