Don Isauro un pervertido Tendero. Parte 12ª. Final.
Fecha: 26/08/2017,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: sexigaleno, Fuente: SexoSinTabues
... vamos a coger!, ¡sáquesi siñor como cri aste eso!, yo no hago eso, desde que me deje de mi chacal, bueno, ¡pues ya tienes un nuevo chacal!, jejeje, ¡ay siñor que va a aste a pensar de mí!, pues nada de pensar cosas malas, mejor las hacemos, ¿no?, ¡ta bueno!,¿ pero onde nos enredamos?, pues sí quieres vamos a mi recamara, ¡a, que mijor no!, mira ven siéntate y nos vamos calentando juntos, ya las manos de Isauro ya llevaban camino debajo de la enaguas de María, ya sentía la piel tibia que emanaba de las piernas, ¡tese sosiego no mi trastie!, ¿ya María a poco no sientes bonito?, ¡pos sí, siento que me brinca la chumina?, ¡ahí está, pues vengase con su chacal! Ay siñor me está dando miedo, ¡qué miedo!, en eso María ya estaba con las patas abiertas e Isauro entre estás ya machucando la chumina, ¡ay siñor, ayy siñor!, no sea malo, no mi lo meta mucho, ay, ayy, ya las manos de él ya levantaban ese montón de enaguas y de un jalón la pantaleta de maría estaba en el piso, mientras el pene picaba la entrada, hasta que encontró la cueva llena de pelos despeinados de María, quien al sentir la cabezota, sólo abrió los ojos como platos, al sentir lo hinchada que estaba y que ya iba abriendo camino adentro de ella, ayyy, siñor noo, despacio siñorr, ayyyy, ayyyy, dos empujones bastaron para que Isauro se acomodara en el interior de esa vagina, María sólo gritaba ayyy, ayyyyyyyyy, ayyyyyyyyy, ¡en cada empujada de carne!, eran alaridos de ayes, a Isauro lo sorprendía de lo bien cuidada que ...
... estaba sexualmente, eso lo llevaba a excitare más, y entraba y salía, por un buen rato, hasta quedar descansando su pelvis en la de María, quien a esas alturas derramaba lágrimas sin decir nada, un segundo aire tomó él y otra vez le daba hasta sacar su hombría completa y deslizarse a fondo por múltiples veces, ayyy, ayyyyyy, mi matas siñor, mi matas, ayyyy, ayyy, entre las acometidas que él imprimía, por fin logró arrancar unos gemidos leves de ella ahh, ahhhhh, ajhh, ajjjhhh, mi matas siñorrrrrrrrr, ayyy, mi matasssss, me voy a miar, me meooo, me meooooo, ayyyyyy, ayyyyyyyy, no era miada, isauro le arrancó un orgasmo interminable, ya que María quedó casi en el desmayo, ya pasadas las excitaciones de ambos, y el pegado aún solo se acomodó a manera de sentir el hueso que cubre el monte de venus de toda mujer, para verter largos chisguetes de leche masculina que entraron en la intimidad de maría, quien los aceptaba en esa posición y diciendo ¡qué ricos sus riegoss siñor!, calientitos, ayyyy, me queman hasta la panza, ayyy, ayyyy, pasadas las calenturas de ambos se dieron a limpiarse, maría tomó su calzón del piso y se lo colocó se bajó todo ese nudo de ropa, mientras el sacaba de su billetera dos billetes de a cien pesos, que se los extendió, a manera de pagarle sus verduras y lo demás era para ella. En eso ya maría se retiraba, pero caminaba con las piernas abiertas, así que Isauro le preguntó, ¿qué te duele la chumina?, pos sí, ¡está aste muy largo!, y pues crio que hasta me saco ...