El Motel - Relatos Eróticos

El Motel

... tan grande.Comenzó a acariciarsela lentamente, con unas manos pequeñas y regordetas. Entre sus manos aun parecía tener la polla más grande. Algo que parecía querer que no olvidara ella.- Joer, esto no me cabe a mi, es enorme. - Repetía mientras la frotaba.El quiso echar mano a sus enormes pechos pero ella lo esquivó agachándose y poniéndolo de espaldas a la ducha.- Hay que bajar esta hinchazón.El no podía dejar de pensar que en cualquier momento podía entrar alguien y verla allí agachada comiéndosela. Y aunque él tenia prisa, no solo por correrse, ella parecia no tener ninguna y que quería disfrutar de lo que hacía.- Que buena, es enorme, no me va a caber.- No dejaba de repetir mientras se la comía como si fuera ella la que se ponía cachonda.No sintió como se corría, hasta que ya había llenado la boca de la chica. Estaba siendo un orgasmo lento en el que primero eyaculo una pequeña cantidad sin fuerza que fue saliendo poco a poco. Cuando quiso avisarla entre espasmos, ella ya se estaba tragando esa primera tanda sin darle demasiada importancia. Aumento la intensidad de su comida y él por fin tuvo un fuerte orgasmo sintiendo como salia el semen violentamente. En ese momento ella se retiró llenándose la cara el pelo y todo el cuerpo, para después volver a comerla.Era la corrida más grande que recordaba haber tenido. La chica estaba llena de semen por todas partes, la cara la boca los ojos y sobretodo el pelo. Aparte del que se había tragado y seguía tragando pues continuaba ...

... chupándosela.El agua recorría ahora la cara de la chica, llevabandose los restos de semen, solificandolos y quedándose enganchados en todas partes.- Que barbaridad.- Le dijo riendo.- El semen esta a proporción de tu polla.Intentaba sin éxito eliminar los restos de entre sus dedos o su pelo, mientras el jugaba con sus pechos y le mordía los pezones humedos. Ella se puso en situación de nuevo agarrándole la polla.- Ahora está mejor, más blandida.Pero él no estaba pensando en penetrarla aún, necesitaba unos pocos minutos más. Se agachó entre sus muslos para poder explorar aquel coño carnoso y sonrosado.Al empezar a introducir los dedos, comprobó que estaba a mil, lleno de fluidos y ardiendo. Apartó pliegues y carne en busca del botón mágico y lo lamió intensamente. Se encontró con los primeros espasmos de la chica y como le cogía la cabeza y se la apretaba para que no dejara de comerle el clítoris.El hizo trabajar su lengua con intensidad en aquel humedal de agua y excitación. El ruido de la ducha, los sabrosos muslos y las manos de ella, le impedían oír los gemidos de placer, pero le dio la sensación que no se estaba cortando.- Joer, lo comes también como grande tienes la polla. Sigue!!-Sintió los orgasmos encadenados de ella, seguido de un aflojamiento de la presión que estaba haciendo con sus manos.- Follame follame follame.- Suplicaba.Cuando se levanto dispuesto a clavársela, notó la fuerza que había echo la chica, en forma de dolor cervical. Le levanto un muslo, se valió de la ...