Convirtiendo a mi esposa en puta
Fecha: 14/12/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Domador7, Fuente: CuentoRelatos
... masturbación. Ya para ese entonces sabía muy bien controlar su clítoris con mis dedos, esperé a que se le pasaran las ganas de correrse sin dejar de frotar mis dedos en su clítoris, y cuando finalmente perdió la posibilidad de eyacular, volví al ataque haciendo más constantes las presiones sobre su vagina. Nuevamente avance con mi dedo hacia el interior de su culo y note como poco a poco empezó a ceder. Su resistencia para dar paso a la desaparición de mi dedo medio. Sentía lo cavernoso de su culo, caliente, húmeda, despacio, despacio, pensaba yo, hasta que la base de mi dedo topo con su orto, guuaaauuu, lo tenía todo adentro, empecé a mover mi dedo medio dentro de ella, estaba tocando su recto, presione un poco para hundirlo lo más que podía y comencé a masturbarla más, y máas, y máaass, y máaaass rápido. Ella por reacción comenzó a mover su trasero hacia arriba y hacia abajo, entendí de qué se trataba, y paso lo que no tenía que pasar, me ganó la calentura, despacio saque mi dedo, ella solo atinaba a gemir. Sabía que su terror a ser penetrada por su ojito había desaparecido y que ahora daba paso al placer, por lo que no aguanté las ganas y haciendo uso de dos dedos entrelazados procedí a invadir de nuevo su hoyuelo haciendo que el diámetro de la penetración aumentara, procedí a hacerlo de manera lenta hasta que su culo cedió y nuevamente mis dedos comenzaron a entrar, solo podía ver como su orto se comía mis dedos y como al ir avanzando mi esposa comenzó a emitir ayes ...
... de dolor los cuales eran producto del proceso de desvirgo de su culo, detuve mis dedos sin dejar de frotar su conchita hasta que fue ella la que empezó nuevamente a moverse, primero lo hacía despacio y luego más rápido por lo que aumente las frotadas de su clítoris intensificando más el gozo que el dolor, cosa que me salió de maravilla pues no tardó en correrse por un buen rato. Sentía mi mano izquierda bañada en sus flujos y mis dedos moviéndose en el interior de su ano. No lo podía creer, acababa de desflorarle el chiquito a mi esposa, y le encantó, no me lo dijo en ese momento pues la notaba como con pena, pero yo sentí que su orgasmo había sido glorioso. La besé y la abracé cuidando que mis dedos de la derecha no tocaran su cuerpo en lo más mínimo. Quería que sintiera lo agradecido que estaba con ella por permitirme romperle por el chiquito por el momento con mis dedos y que sintiera que la cuidaba y que nunca la lastimaría. Terminamos felices.
Ese fue el principio de nuestro morbo anal, ahí fue donde me di cuenta que ella era una putita en potencia, pero nunca me imaginé que me saliera tan puta. Como en el trabajo que tengo siempre me han dado vehículo como una prestación, aprovechaba a salir a pasear con mi esposa en el mismo, le contaba historias de sexo y la calentaba para que llegáramos a la casa y cogiéramos como conejos. Hubo uno en especialmente donde paseábamos de noche y en una carretera vecinal poco poblada la hice que me empezara a tocarme por encima del ...