Así se comienza un nuevo año...
Fecha: 22/10/2023,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: femerba, Fuente: CuentoRelatos
... semblante un tanto adusto por parte de ella, como enojada, nos dirigimos a la pista y nos dedicamos a bailar. No le pongas tanta atención al asunto y olvidemos lo dicho ¿vale? ¿A ti no te molesta? Preguntó. El comentario de tu marido, la verdad, me pareció un poco atrevido en esta ocasión. Y traté de alterarme un poco. Pero eso me han dicho los mulatos cuando bailan con ella, y es lo que encuentran atractivo. Por eso no me ha sorprendido. Pero, con ellos ya se sabe cómo es el juego. En esta ocasión, se supone, estamos compartiendo algo más formal. Sí, es verdad, respondió.
¿Y a ti no te dan celos? Continuó. ¿En qué sentido? Respondí. Pues que Laura esté teniendo relaciones sexuales con otros. ¿No te molesta? La verdad, no, contesté. Si llegamos a aquello es porque estuvimos de acuerdo, esté yo presente o no. La mayoría de las veces yo he estado acompañándola, así que no me incomoda. De hecho, debo confesártelo, me excita ver que ella lo está pasando bien. Ella, sabiendo que yo estoy ahí para protegerla, si fuera el caso, disfruta de su macho sin prevención y con todo el entusiasmo. En ese sentido, no me dan celos. Es una aventura compartida en pareja. ¡Claro! Ella está con su macho, pero yo veo la escena en primera fila. Es eso…
¿Y solo ha estado con negros? No, respondí. También ha estado con blanquitos, pero ciertamente los negros y las vergas grandes son lo que la excitan y disfruta al máximo. Incluso alguna vez estuvo con un muchacho normal, comparado con esos ...
... negros, y la pasó muy bien. Al menos fue lo que se vio. Pienso que, en esto del sexo, la mente juega un papel importante. Nosotros generamos expectativas con respecto al desempeño de las parejas sexuales y, según lo que esperemos, igualmente disfrutamos. Puede ser, puede ser, dijo ella. Y así, entre charla y baile, pasamos largo rato, finalizado el cual volvimos a la mesa.
Allí estaban conversando animadamente Laura y Jorge. Así que nos integramos todos y volvimos a compartir y brindar, pues ya se estaba acercando el fin de año. Los anfitriones animaban a todos los asistentes. Pasaba el tiempo y pronto empezó la cuenta regresiva, 5, 4, 3, 2, 1… ¡Feliz año! Todos nos abrazamos, estrechamos nuestras manos y nos dimos el feliz año nuevo con mucha alegría. Hubo fuegos artificiales, palabras de despedida del nuevo año y, finalizado aquello, aplausos, abrazos, brindis y más saludos. Y después, la música nuevamente empezó a sonar.
Volvimos a bailar. Ya estábamos más tomados, más alegres y también un poco más desinhibidos. Sandra y yo vimos a Jorge acariciar a mi mujer mientras bailaban, con mucha delicadeza, pero también con mucho deseo. Yo fingí no darme cuenta, pero Sandra no perdía detalle. Y, claro, no pasó mucho tiempo antes que me dijera que, al parecer, Jorge estaba muy entusiasmado con mi mujer. ¿No te parece? No te preocupes, dije yo, esto pronto va a acabar y cada quien para su casa. Así que no te afanes y trata de terminar bien la noche. Pues eso intento, dijo ella, y me ...