Mi papá me coge dormida (Parte I) - Relatos Eróticos

Mi papá me coge dormida (Parte I)

... la entrada de mi vagina, haciendo una ligera presión, también me presionaba los labios y los juntaba con sus dedos, marcando aun más mi rajita y haciendo que la tanguita se hundiera aun más en ella. 
-que rica conchita tiene mi nena, se te hunde toda tu tanguita entre estos labios gorditos mi amor. No sabes las ganas que tengo hoy de abrirte y hacerte mi mujer, ahora si vas a sentir como papi te viola de verdad y te deja llena de lechita. 

Me sacó la tanga de entre los labios y la hizo a un ladito. Lo escuché chuparse un dedo que lentamente me fue introduciendo en la vagina. Tuve que hacer mucho esfuerzo para no moverme ni gemir de placer.
-uff pero la putita de mi hija tiene una panochita muy estrecha, no te has comido muchas vergas mami?- sacó el dedo y me lo metió en la boca -esoo, prueba tus juguitos vaginales bebé, están ricos? Dejame probar a mi. 

Volvió a meterme un dedo, lo sacó y escuché como lo chupó, repitió lo mismo unas tres veces hasta que lo sentí acercar su cara y darme un beso directamente en mi conchita, luego empezó lamerme de arriba a abajo, metiendo su lengua en mi vagina y saboreandola toda. 
-mmm que rica conchita tienes hija, eso dale tus juguitos a papi. Hasta dormidida te mojas toda, me saliste bien zorrita mmm qué ganas tenía de comerme esta panocha de puta, mira nada más como la tienes toda hinchadita y mojada. 

Volvió a meterme un dedo y luego dos al mismo tiempo, dilatando mi vagina y dedeandome un buen rato mientras yo seguía ...

... mojandome cada vez más. Yo solo escuchaba el sonido de sus dedos entrar y salir, intercalados con el sonido de su boca al comerme la conchita, saboreandola y gimiendo.

Me quitó después la tanga y me abrió bien las piernas, sentándose entre ellas. Acercó su pene y lo empezó a frotar en mi rajita y a darme golpecitos con él. 
-cuantas vergas han entrado por esta panocha? Seguro que te gusta andar de puta verdad? Pues papi te va a tener que castigar, para que aprendas a no andar de ofrecida. Eres de mi propiedad y solo yo te voy dar verga de ahora en adelante. 

Posicionó la punta de su verga en la entrada de mi vagina y la fue empujando, abriendome lentamente, sentí que escupió para facilitar la entrada, aunque no hizo mucha falta porque yo ya estaba muy mojada y no opuse ninguna resistencia, además de que sus chupadas ya me habían llenado aun más de saliva. 
-uff pero si aprietas rico todavía mi amor mmm ojalá pudieras ver como va entrando la verga de papi en tu panocha rica. Ya la quieres toda adentro? Que golfa traga vergas eres, pues ahí te va, esoo ábrete perrita, recibe mi verga, eso ponte flojita, deja que te la meta. 

Me ensartó poco a poco el resto de su verga, yo apreté los dientes tratando de no hacer ningún ruido, porque me dolia un poco por lo gruesa que era, pero al mismo tiempo no podía evitar sentir placer. 
-ahh qué rico mi amor, ya la tienes todita adentro, si te entró completa uff como aprietas. No sabes las ganas que tenía de agarrarte y violarte cada ...