Un equipo para mi solo (2º parte) - Relatos Eróticos

Un equipo para mi solo (2º parte)

... de los chicos a los que les iba comiendo la polla, comía polla y huevos, bien salivado todo, a veces hasta me chorreaba por la barbilla. También les manoseaba sus culos, pasándoles mis dedos por sus rajas.
Después de estar así un rato, la acción pasó a otro nivel. Uno de mis compañeros, mientras yo seguía de rodillas, intentó penetrarme por detrás. Al principio me dolió un poco pero después de varios intentos, su polla entró. Sería el comienzo de la mayor follada que me hayan hecho en mi vida.
Me había acostumbrado a esa mezcla entre molestia, que no dolor, y placer. La polla entraba y salía con facilidad mientras yo seguía a lo mío, comiendo pollas. Veía que se iban turnando entre darme polla y follarme el culo.
- "Ponte sobre la mesa y así pasamos todos", dijo uno.
Y eso hice, me tumbé boca arriba en la mesa que había allí, levanté un poco las piernas y comenzó la follada de mis 8 compañeros. Unos me daban polla, los que estaban a mis 2 lados, mientras el resto me iba follando con ganas, turnándose entre ellos. Mi polla estaba dura y tiesa mirando al techo. Los gemidos de todos, yo incluido, se apoderaban del vestuario. No paraban de follarme mientras me comía las 2 pollas que tenía a mi alcance. Se iban turnando, los que me follaban el culo pasaban a que se la comiera mientras que a los que les hacía mamadas pasaban a metérmela hasta el fondo de mi culo. Yo estaba en la gloria y por eso no pude aguantar más y me corrí sin haberme tocado. El meneo que estaba teniendo ...

... estaba claro que iba a acabar así. Varios chorros saltaron de mi polla cayendo sobre mi pecho y algo más salpicó por los alrededores míos debido a los movimientos que estaba teniendo de las penetraciones. Apenas unos segundos después, empezaron los orgasmos de mis compis, algunos corriéndose sobre mis huevos, polla y pecho y otros directamente dentro de mi culo. 
Mientras unos iban deslechando, otros seguían follándome y dando polla para que se la comiera.
- "Date la vuelta, Dani, que esto no ha acabado"
Me bajé de la mesa y me puse de pie recostado sobre ella dándoles mi culo a mis compañeros para que siguieran metiéndomela. Y eso hicieron: de nuevo me iban follando por turnos, con energía, mientras otros se iban poniendo a mi lado para que se la mamara. Alguno notaba que ya se había corrido por el sabor especial que notaba mientras se la comía pero sus pollas estaban duras como si no hubiera pasado nada. Mientras tanto, seguían follándome uno detrás de otro a la vez que me pajeaba lo que podía porque, a decir verdad, poco podía tocarme con tanta polla a mi alrededor. 
La follada era ya brutal y mi culo estaba preparado para lo que fuera después de tanta polla dentro. En ese momento uno de mis compañeros se tumbó en el suelo y con su polla tiesa me dijo que me sentara en ella. No fue difícil que entrara así que, dándole la espalda, empecé a botar y cabalgar sobre su polla. Y volvieron a darme polla para mamar. Yo estaba en éxtasis total y apenas tocándome un poco, volví a ...