... que tenía en el lado derecho del mismo.
Fran, no le quitaba ojo, y vi en su calzoncillo, que le gustaba lo que veía. Era un chaval deportista, muy fibrado, de cerca de metro noventa de estatura. Y debia de tener un buen instrumento.
Miriam, era alta, casi 1,75, delgada, con unas buenas tetas también, más pequeñas que las de mi novia, una talla menos, calculé a través de su sujetador, pero con la turgencia de la juventud. Sus pezones parecían querer rasgar la tela y saltar fuera. El tanga, dejaba entrever un monte de Venus recortado, tipo brasileño, y su culo, redondo y perfecto. Estaba muy buena. Un tatuaje de unas flores en su brazo, y varios piercing en las orejas.
Toco el turno a María.
Yo nunca he hecho un trío, dijo. Fran, bebió y calzoncillo fuera, medio empalmado ya. Para mi asombro, Miriam Bebió y sujetador fuera. Mi chica y yo, quedamos perplejos, y eso que nos considerábamos abiertos en el sexo.
Yo nunca bese a alguien de mi sexo, dije. Mi chica y mi hermana, bebieron y quedaron desnudas completamente. A mi hermana, en ese momento pude verle el piercing que asomaba en su entrepierna, en el clítoris. Joder, que buena estaba y que morbazo, imaginándola encima comer la boca a otra tía!!
Fran ya estaba completamente empalmado, y no disimulaba nada mirando a María, incluso se tocaba la polla haciéndolo.
Has ganado brother, me dijo mi hermana. Pero no es justo que no quedes en bolas.
María se le acerco y le dijo algo al oído. Que sensualidad desprendían, ...
... desnudas y tan cerca una de la otra, con los pechos rozándose, me empalmé de golpe.
Una pregunta final, si acierto te despelotas, me dijo
Ok, dije yo
Yo nunca he practicado Sado, dijo riendo.
Eres una cabrona, dije mirando a María. Y me despojé de mi calzoncillo. Mi pene era mas pequeño que el de Fran, pero bastante más grueso. Mi cuerpo, no tan atlético como el suyo, esta muy trabajado de gimnasio, menos definido, pero también más voluminoso. Y voy totalmente depilado. Mi hermana miraba mi polla sin pudor.
Seguía muy pegada a María, y de repente, le tomo la cabeza por la nuca y empezó a besarle la boca. María le respondió, con una mano en la entrepierna, y Miriam se dejó hacer. Fran y yo nos miramos sin saber muy bien qué hacer. Se tumbaron cerca de la chimenea y nos mandaron acercarnos.
María se tumbo boca arriba, separó las piernas y con una mano, abrió sus húmedos labios, mirando a Fran, que aceptó la invitación sin titubear, tumbándose sobre ella, para empezar a comerle el coño. Mi hermana, a horcajadas sobre María, se dejaba comer también. Me acerque a ella, y le metí mi polla en la boca. Que placer, como la chupaba!! El piercing de la lengua, rozaba mi glande, y aportaba un plus de sensaciones. Estuvimos un buen rato así. Tomé la iniciativa. Puse a las 2 chicas haciendo un 69 sobre la mesa baja frente a la chimenea. Fran, empezó a alternar el coño de María con la boca de mi hermana. Yo empecé a follarmela desde detrás, mientras con un dedo empecé jugar en su culo. ...