Bañándome con mama - Relatos Eróticos

Bañándome con mama

... que terminó fue hasta el baño, yo continuamente pegado a ella, se comenzó a desvestir, mis ojos no perdían detalle, cómo nunca quería verla desnuda y poder tocar su cuerpo. Una vez que se sacó todo, me dijo que me desvistiera yo inmediatamente me saque toda la ropa y no pude evitar que se me empezara a poner dura la verga, ella al verlo sonrió y me dijo
Mama: viste que ya estás grande, yo soy tu mamá , no se te puede poner así por mi. 
Yo le respondí que me encantaba y que era por ella que se me paraba, usando mis palabra me dijo.
Mama: ¿siempre se te para por mi? 
Yo: Si ma, me encanta verte desnuda, sos re linda
Mama: ¿Y porque se te pone así? ¿Qué me querés hacer? (Con vos de nena desentendida)
Mientras decía esto se metió a la ducha y me dijo que entrara, inmediatamente entre y ella con total suavidad agarro mi pija con una mano y con la otra la comenzó a enjabonar, fue de una manera tan sensual que en 2 minutos me hizo acabar, haciendo que salte el semen sobre su vientre y salpicando los pelos de su concha por dónde caía el agua. Cuando sintió que iba a salir la leche sonrió y apuro a los masajes… 
Cuando acabe ella totalmente dominante me dijo.
Mama: vos te querés coger a tu mamá me parece,  ¿Eso querés?
Yo con las piernas temblorosas y habiendo vivido la mejor experiencia de mi vida le respondí que si, que era lo que más quería, ella cero la ducha y de la mano me llevo aún mojados hasta su habitación. Ahí me dijo que ya era un hombre y que si ella me regalaba ...

... lo que yo quería era un pacto de fidelidad mutuo, yo le respondí que si.
Se acostó en la cama completamente desnuda de costado y me dijo que me acueste junto a ella, una vez  en la cama me empezó a besar en los labios, yo le respondí con mi inexperiencia, y comencé a manosear sus tetas descaradamente, ella me dejaba que yo la manoseara toda, le acariciaba los suaves pelos de la concha, tocaba su enorme culo… cuando se me pudo dura nuevamente, se puso boca arriba y abrió las piernas, me dijo que me colocará encima de ella y con su saliva lubrico mi pija coloco punta en la entrada de su concha y me dijo que se la empiece a empujar, yo intentando hacer lo más parecido a los vídeos que había visto la empecé a coger, ella muy complaciente para que yo sienta seguridad me decía que estaba delicioso que siguiera, mi pija se ponía cada vez más dura e intentaba en cada embestida metérsela con más fuerza para que la sintiera, al igual que una pareja de amante yo besaba su boca y ella me devolvía los besos, apretaba sus tetas y esto más la excitaba, luego de unos diez minutos, termine dentro le ella llenado la de mi leche caliente, ella feliz no podía disimular que le encantaba lo que estaba ocurriendo… así comenzó ese sábado en el cual con toda mi energía adolescente la quería coger cada vez que podía, hasta que anocheció cogimos tres veces más y me quedé dormido en su cama, al día siguiente lejos de mostrar arrepentimiento nuestro vínculo había cambiado ya éramos amante, ese domingo ...