La barbera - Relatos Eróticos

La barbera

Me conocen como “fizgon”. Me dedico a filmar eventos privados dentro del ámbito sexual. 
Luego con mas tiempo contare como llegue a este oficio.
La cita es el un motel en los limites de ciudad sobre la carretera. Despues de una hora, mi teléfono vibra, sin verlo se de quien es la llamada, “Buitre” ( mi jefe por decirlo asi, es el contacto que me designa los trabajos), me da las indicaciones. 
-Suite 3, la herramienta esta en recepción, ya sabes que hay que hacer al terminar.- Cuelga sin esperar respuesta.
Camino al motel y paso a recepción. Un grandulón aguarda parado en el lobby, una de sus enormes manos sostiene una pequeña maleta, que al verme la levanta para que la tome. 
No necesita decirme nada, siempre se maneja igual. Como en todos los trabajos la maleta contiene una anticuada camara tipo handycam de minidisc. Mi herramienta de trabajo.
Me dirijo a la suite. No necesito la llave, hay otro grandulón esperando en la puerta que sin mediar palabras me abre la puerta para que entre.
Enciendo la cámara y empiezo a filmar. En el centro de la suite hay una camilla, que solo he visto en los hospitales. Una de esas que utilizan para los partos, con soportes de metal a los lados.
Después de unos segundos, escucho unos pasos atrás de mí. Sin dejar de voltear giro el cuerpo. Una pequeña figura aparece en mi lente. 
Tengo que retroceder para mantenerla a cuadro. La joven mujer solo lleva una bata de baño y en sus torneadas piernas unos tacones muy altos.  Posa ante la ...

... cámara, su mirada se hace intensa y un par de destellos esmeralda se refleja en mi lente, sin expresión alguna en su rostro y sin ningún pudor deja caer la bata, dejando al descubierto su hermoso cuerpo. Lleva puesto un juego de ropa interior negra. El sostén y las bragas están abiertas en las zonas centrales. Dejan ver unos pezones duros y el bello púbico de la vulva. 
Sabe de lo que se trata. Calculo que no tiene mas de treinta. De piel morena; pelo rizado, se lleva las manos a la cintura separando las piernas hace una cara de reproche y picardía, como si estuviera reprendiendo a un niño.  Deja de mirar a la cámara. Pasa a mi lado, camina hacia el sillón. Toma asiento y levantas sus hermosas piernas para posar sus pies sobre los soportes de metal a los lados. Al recostarse en la camilla cierra los ojos. La imagen es avasalladora. 
Me acerco y filmo su cuerpo. Calculo que mide poco mas  de 1.50 mts. Su rostro de nariz pequeña y respingada, labios color carmín, un cuello delgado hombros fuertes, pechos que subían bajaban rítmicamente por la excitación del momento. 
Fui bajando la lente. Tome su abdomen plano; bien trabajado, sus piernas abiertas y finalmente su vulva; rodeada de bello púbico parecía brillar y ponía en evidencia la urgencia de su dueña.
El sonido de otros tacones volvieron hicieron que girara el cuerpo nuevamente. Con estuche en mano entra otra chica de enormes pechos ( que dedusco una chica trans, sin querer ofender a nadie, recuerden que solo soy un fisgon) ...