Planes a futuro - Relatos Eróticos

Planes a futuro

Soy Bel, vivo con mi tía en una zona roja, ella es prostituta y con eso nos mantuvo a mi y a mi prima desde que recuerdo, tenemos la misma edad con Angy, y somos muy unidas la verdad, siempre supimos lo que mi tía hacía y lo veíamos como un trabajo, pero en jardín entendimos la doble moral con la que juzga la sociedad, después de un pleito grande, nos mudamos a un colegio muy respetado, no decimos de donde somos y somos realmente unas niñas ejemplares, en casa claro, la historia es distinta, al pasar el tiempo no sólo aceptabamos el trabajo de tía, la admirabamos, y con la adolescencia las ganas de emularla crecieron, ella fue clara y cruda al respecto, pero no nos detuvo, ella es una punta santa, incluso nos alentó ya viendo nuestra determinación, necesitaríamos fondos para la facultad después de todo, pero había una regla, sólo podríamos bailar y calentar a los clientes hasta que dejemos de ser vírgenes, y es que a pesar de todo nuestro esfuerzo, una doble vida llevaba mucho esfuerzo para poder encontrar a quien cojer también. Las noches pasaban y nosotras maquilladas con esmero y mucha maña por nuestras futuras colegas bailabamos frentea hombres gritones, y bebiamos en el regazo de hombres serios, cada toque nos calentaba aún más y más de una vez me hubiese dejado penetrar por algunos, pero siempre llegaba otra nos sacaba y los guiaban a los privados, una noche cerca de mi cumpleaños, un grupo de 3 me dejó particularmente caliente, quería sexo y no importaba si era pagado, ...

... lo habría echo gratis, pero me los sacaron, y fui por otra cerveza, encontré a Angy en la barra, ella  parece un ángel con sus ojos enormes, labios rojos como su madre y el cuerpo menudo pero moldeado, yo soy más alta, con curvas más profundas y rostro más duro, ese ángel que amaba tanto estaba zollosando con su bebida, así que en un estallido de rabia la arrastre conmigo a casa, a unas cuadras del bar, auténticas lagrimas rodeaban su rostro cuando llegamos, la abrace y lloramos juntas largo rato, nos fuimos a bañar ya que el maquillaje y la purpurina se veía fea con las lágrimas, la bañe para limpiarla y ella hizo lo mismo, en la tina la vi tan tierna, y la bece, ella me siguió el beso y luego estábamos abrazadas, besándonos con más pasión, nos restregamos primero, y luego nuestros dedos penetraron la vagina de la otra, Angy gemia y exigía más besos, yo quería sentirla entera y trataba de besarla como me besaron hace unas horas, para enloquecerla por mí, baje a sus pequeños pecho y sus gemidos llenaron mis oídos, bese su vientre y me hundi en su vagina, la sentí contraerse, temblar y gemir mientras me aplasta a a su clitoris que sabía algo dulce y encantador, fuimos a la habitación y pegamos nuestras camas para seguir, volví a su vagina antes de dejar que ella jugará con mi cuerpo, llegué casi de inmediato al primer orgadmo compartido, luego fue un 69 constante, y rozamos nuestros clitoris también, la presión fue exquisita, cuando tía nos encontró enredadas al amanecer reía ...