Perra amarilla - Relatos Eróticos

Perra amarilla

Mi perra preferida una criolla con una vulva gigante   la llegue a acostumbrar cuando estaba en celo no queria perros  cuando me veia me alzaba el rabo y me abria y cerraba la vulva no se si mi mamá llego a sospechar algo por que la perra  siempre   que estaba en celo me buscaba me la culiaba en las noches que lujuria solo de imaginarme  andaba  con la verga templa  a oscuras la esperaba sentado en una silla con las piernas abiertas me mamaba la verga y le metia los dedos para ponerla más arrecha luego que me mamaba la verga ella misma se daba la vuelta y me ponia la vulva que  arrechera me sentia un verdadero perro  pero le ponia la cabeza de la verga nada más     la perra hasta qué se arqueaba    de la arrechera  le ponia la lubricacion dela verga en la entrada de la vagina se echaba a lamerse la vulva   hiva y le tocaba las ancas y se levantaba poniendome la. Vulva   lla estaba dispuesta  la agarraba por las caderas y le empezaba a buscar la entrada como era de una vagina grande se la podia agarrar con la mano la puntiaba asta que se echaba asia atras despues que se le mete la cabeza ya lo dificil esta echo solo hay que acomordarsela un poco asia arriba y se le va toda esta caliente y aprienta la misma cabeza  se la tenia  enterra y no me movia aguntar un  culeo con una perra caliente es cosa seria  por que ese hueco esta caliente  se la sacaba y se la metia hasta que sentia que me venia venirse con una perra es rico por que no sueltan la verga asta qué no tas venido por completo le gusta la verga por que recien se la avia sacado y me levantaba el rabo  le aguantaba tres culia en la noche el ultimo se lo echaba alas cuatro de la mañana hasta que me quedaba la verga cabezona y roja son culionas culie muchas perras ahora mismo no tengo pero espero conseguir una boxer por que tienen la vulva grande por que la verga mia es de respeto y me gusta metercela toda espero lrs guste