La vecina del franelon - Relatos Eróticos

La vecina del franelon

Mi nombre es Andrea, tengo 40 años. Vivo en Venezuela, Tengo un hijo de 19, el se fue a vivir a otro país a casa de unos familiares, se fue a estudiar y buscar un mejor futuro. Mi esposo falleció hace algunos años y desde ese entonces había perdido mi deseo por estar con otros hombres. A ambos nos encantaba hacer ejercicios. Yo soy bajita, mido 1.60, de piel blanca, cabello negro por los hombros, aun sigo haciendo ejercicios pero en casa, tengo un trasero paradito y mis senos son operados, 550 CC cada uno. Cuando estaba con mi esposo era la mas perra de todas, siempre me gusto el buen sexo. Lo complacía en todo. No se imaginan todas las locuras que hacíamos.

Desde que mi hijo se fue decidí tener una nueva vida, tanto que hace 3 meses me mude de ciudad y decidí trabajar desde mi casa haciendo publicidad por Internet y las redes sociales, antes me vestía muy sexy, ahora solo ando en franelones y pantalones holgados, hasta me veo gorda, quizás por mis senos y los franelones, en la calle no llamo mucho la atención, soy muy bonita pero no me estoy ni maquillando. 

Bueno mi historia comienza desde que me mude, estoy viviendo en un edificio, es un piso 6, mis vecinos son bastante amigables, a los pocos días conocí a Julián, es el vecino del frente, esta casado con Martha, y tienen un hijo pequeño. Cuando vi  Julián me impacto mucho su tamaño, es un hombre moreno de 1.80 mts de estatura aproximadamente, con manos grandes, y cara refinada. El me comento que era electricista pero ...

... hacia todo tipo de trabajos. Martha era muy amigable, tanto que varias veces ha entrado a mi casa a tomar café y compartir historias. Un día tuve un problema de electricidad en el tablero principal y le comente a Martha, ella muy animada me dijo que iba a hablar con su esposo para que me ayudara.

Al siguiente día me sorprendió que me tocaran la puerta, cuando pregunte quien era, me respondió Julián. Abrí la puerta y el estaba con varias herramientas y me comento que Martha había hablado con el para que me ayudara. Yo lo deje pasar y le ofrecí café, el me comento que Martha se había ido a trabajar e hijo estaba en el colegio. Julián tenia puesto una camiseta muy pegada al cuerpo y podía notar sus grandes bíceps, de alguna manera ese hombre estaba causando algo en mi. No me había fijado que yo andaba en un camisón grande pero no tenia ropa interior abajo. Igual no me importo, me senté en el escritorio q tenia en la sala a hacer algo de publicidad. Julián no se fijo en mí, solo se dedico a hacer la reparación, el terminó de trabajar y me llamo para que viera lo que hizo, su olor era muy agradable, como perfume mezclado con sudor. Cuando salió del apartamento me dio la mano y fue muy agradable.

Mis pensamientos empezaron a volar, a recordar lo mucho que me gustaba el sexo, tanto que no aguante y me fui a mi habitación y empecé a masturbarme, mi vagina estaba súper húmeda, me dio hasta pena porque tenia mucho vello pubico, decidí desde ese día depilarme toda, pero no quería ...