1. Viendo TV y comiendo verga


    Fecha: 03/01/2022, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Contador4u, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Una noche antes del dia en que se regresaría definitivamente al rancho, nos quedamos viendo TV hasta muy tarde, aprovechando que era viernes y nos dejaron solos, a manera de despedida. Estábamos ambos en short corto de pijama, sentados lado a lado en un sofá muy amplio, a media luz, con la habitación iluminada solamente por la luz de la pantalla que subía y bajaba de intensidad, metidos en el mayor de los silencios, sin hablar. Cuando la casa se quedó en calma total lancé un amplio bostezo…-Recuéstate aquí, me pidió, y me heché de lado, recogiendo mis piernas en posición fetal, a lo largo del sillón y recargando la cabeza muy cerca de su entrepierna. Me cubrió con una sabana hasta los hombros y saqué los brazos para estar más cómodo, reposando mis manos sobre sus muslos desnudos. Seguimos atentos al programa, luego el Cholo se acomodó deslizando su espalda para quedar semi recostado sobre el respaldo del sofá. Me incorporé para recostar mi mejilla sobre su abdomen, quedando el abultado paquete de su entrepierna frente a mi vista, justo entre mis ojos y la TV. Deslicé la mano recorriendo hacia arriba de su muslo, deteniéndola justo donde empezaba la bolsa de sus huevos, quedando sus bolas reposando en el dorso de mi manita. El Cholo bajó su mano hasta mis nalguitas, y yo giré la mía para quedarme con sus huevos en la palma de la mano, mientras él abría las piernas; me di cuenta que no llevaba ropa interior, porque pude sentir pelos por debajo de la tela. Mientras el recorría ...
    ... mis nalgas por encima de la sabana, yo acariciaba sus bolas peludas por encima de la pijama.  Vi que el bulto le crecía más, marcando una forma cada vez más larga y gruesa mientras se le iba inflando. -Qué gordas tienes las bolas! Le dije en un susurro…y subiendo mi mano hasta el pene…-y qué largo palo! Lo recorrí suave y lentamente de arriba a abajo, acariciando también muy despacio sus huevotes, y otra vez su verga, alternadamente, hasta que se le puso durísima, como fierro! No me di cuenta en qué momento lo hizo, pero ya tenía yo mi short en las rodillas y el Cholo me acariciaba suavemente las nalgas desnudas…-Qué redonditas y carnositas…duritas! Me dijo despacio dándome una nalgadita. Yo ya tenía mi mano dentro de su short, masturbando su grueso y largo garrote. -Qué caliente y duro! admiré subiendo y bajando mi manita. -Sácala del short, me ordenó, y ya sus dedos recorrían mi rajita, separándome las nalgas, en busca del hoyito…Todo lo hacíamos en silencio, entre murmullos, y casi sin movernos de la posición original, salvo por las manos que no se daban pausa, buscando y encontrando los objetos de sus deseos. Bajé el resorte de su pijama hasta por debajo de sus huevos y su enorme verga, dura, saltó como resorte hacia mi cara, aún recostada sobre su vientre. Sin levantarme ni cambiar de perspectiva, el alzó las nalgas del sofá y pude bajarle el short hasta las rodillas, que después se deslizó solito hasta los tobillos. Me quedé hipnotizado mirando su enorme verga morena, ...
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