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El nuevo perro de mi tío
Fecha: 15/12/2021, Categorías: Zoofilia Tus Relatos Autor: Esteban Rhodes, Fuente: drugsounds.ru-X
Hola me llamo Esteban, ya tengo tiempo leyendo todo tipo de relatos así que por primera vez me anime a escribir uno que es 100% real. Actualmente tengo 18 años, conozco la zoofilia desde hace tiempo pero en el último año me he adentrado mucho en páginas de videos y relatos pues aunque me parecía algo extraña me excita demasiado, por lo que habitualmente me masturbo con dicho material. Un día a mi tío le regalaron un perro realmente enorme, creo que es un gran danés (aunque no estoy muy seguro), la primera vez que lo vi me asusté pues nunca había visto un perro tan grande en persona así que siempre trate de mantenerme alejado. Pero todo cambio no hace mucho, pues después de ver que el perro era muy tranquilo y amigable se me pasó por la cabeza intentar algo con él pero para ser sincero me dio un poco de miedo pues pensaba que podría morderme al tratar de acercarme y es que a pesar de tener mucha curiosidad siempre que estaba con el perro se me pasaban las ganas. Un día que no había nadie en casa me propuse en por fin intentar algo, así que cuando me asegure de que realmente no había nadie tome mi teléfono y salí al patio a buscar al perro. Cuando lo vi estaba dormido por lo que entre a un pequeño cuarto en construcción y comencé a tratar de llamar su atención, estuve al rededor de cinco minutos tratando de hacer que fuera a donde estaba pero al ver que no funcionaba pensé en irme pues no quería que algún vecino pudiera verme pero justo antes de irme el perro ...
... apareció por la entrada del cuarto. Cuando lo vi me puse al mil y sin pensarlo comencé a desabrocharme el short que traía puesto, el perro cuando se acerco a mi se restregaba en mi tanto que me empujo hasta una pared y no podía moverme pero eso no me impidió sacar mi pene. Al inicio el perro solo seguía restregándose, tanto que me lastimó la ereccion que tenía pero después se detuvo y comenzó a oler mi pene para después empezar a lanzar lengüetazos. Dios, era lo más rico que pude haber sentido. A pesar de que ya me la han mamado antes, nada se compara con la deliciosa lengua áspera de un un perro, era tanta mi excitación en ese momento que había olvidado que tenia mi teléfono conmigo por lo que con todas mis fuerzas aparte al perro de mí para poder tomar el celular que estaba en mi short y después de tomarlo comencé a tomar un par de fotos y videos pues quería tener recuerdos de aquel delicioso encuentro. Después de unos minutos decidí irme pues aún tenía miedo de que alguien pudiera vernos, pero no tarde mucho en regresar pues sin importar que quería venirme en presencia del perro pues de solo pensarlo me excitaba demasiado. Así que cuando volví a salir para buscar al perro de inmediato vino hacia mi y después de escondernos nuevamente en el cuarto en el que estuvimos volví a sacar mi pene y sin pensarlo el perro volvió a lamerlo, sentía tan rico que apenas y aguantaba las ganas de gemir y decirle cosas sucias al gran perro que me la chupaba. Un rato más tarde dejo de darme ...